El presidente, Ebrahim Raisi murió en un accidente de helicóptero. Los equipos de rescate lograron llegar hasta los restos del aparato, en una zona montañosa de bosque, de muy difícil acceso en la frontera con Azerbaiyán.
El helicóptero en el que viajaban Raisi era un Bell 212 que formaba parte de un convoy de tres aparatos. Además del presidente de Irán, en la aeronave estaban el canciller Amir-Abdollahian, el gobernador de Azerbaiyán Oriental, Malik Rahmati, y el líder de los rezos de los viernes de la ciudad de Tabriz, Mohammad-Ali Al-Hashem. No hubo sobrevivientes.
“El ayatolá Ebrahim Raisi, presidente de la República Islámica de Irán, ha sido martirizado mientras servía al pueblo. El helicóptero que transportaba a Raisi, debido a las condiciones meteorológicas adversas, sufrió un accidente”, reza un comunicado del régimen iraní en su canal de Telegram.
“A pesar del envío de decenas de equipos de rescate de respuesta rápida para ayudar al presidente y a su séquito, los esfuerzos para encontrar el helicóptero accidentado duraron horas debido a la niebla y al difícil paso por la zona boscosa y montañosa”, lamentó el Gobierno.
Este lunes, el viceministro de Exteriores y negociador nuclear de Irán Ali Bagheri Kani fue nombrado como jefe de la diplomacia iraní tras la muerte de Abdolahian.
El presidente iraní, Ebrahim Raisi, fallecido el domingo en un accidente de helicóptero, será sustituido por el vicepresidente primero, Mohammad Mokhber, hasta la elección de un nuevo mandatario en un plazo de 50 días.