Una ola de calor sin precedentes continúa golpeando a Europa, desatando múltiples incendios forestales en España y Portugal y provocando la primera víctima mortal en Madrid. La situación mantiene en alerta a las autoridades de varios países, que se enfrentan a temperaturas extremas y condiciones propicias para la propagación de los fuegos.
En Tres Cantos, a 23 kilómetros de Madrid, los bomberos trabajaron toda la noche para controlar un incendio que se cobró la vida de un hombre. El humo de las llamas llegó a sentirse en toda la capital española. Este trágico suceso llevó al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a expresar sus condolencias y a convocar una reunión de seguimiento para abordar los "numerosos incendios que están activos" en el país. En Andalucía, las llamas obligaron a evacuar a miles de turistas de las playas de Tarifa. La región de Castilla y León también se vio afectada con más de 30 focos, incluyendo uno en el histórico paraje de Las Médulas.
En Portugal, los equipos de emergencia luchan contra varios incendios, siendo el más grave el de Trancoso, al noreste de Lisboa, donde más de 700 bomberos trabajan incansablemente. El país se prepara para una jornada especialmente difícil, con pronósticos de hasta 44°C en el sur.
Otros países europeos como Italia, Francia y los Balcanes también han declarado alertas por calor, con temperaturas que superan los 40°C. En Italia, la sequía ya está afectando la producción agrícola, mientras que en Inglaterra se registró el semestre más seco en 50 años.
Los científicos advierten que estos fenómenos meteorológicos extremos, como las olas de calor e incendios, se están volviendo más intensos y frecuentes como consecuencia del cambio climático.