El Concejo Deliberante de Cutral Co decidió por unanimidad, pedir al gobierno de la provincia que declare la “emergencia sanitaria” del sistema de salud pública neuquino.
En la práctica es una comunicación dirigida al gobernador Omar Gutiérrez y la ministra de Salud, Andrea Peve, entre otros. No está claro qué busca la solicitud, dado que, en pocas palabras, pide al gobierno provincial que reconozca una crisis hospitalaria. Obviamente, ningún gobierno va a ventilar públicamente sus propias fallas, por lo que la sanción podría ser simplemente testimonial. Dicho de otra forma: puede ser cierto el argumento, pero no parece ser el camino.
En los fundamentos, la norma señala que “la falta de insumos, insuficiente plantel de profesionales, deja a los equipos de salud en cada lugar librados a su propia suerte, con un estado visiblemente ausente” y agrega: “la falta de renovación de equipamiento, la no incorporación de nuevas tecnologías necesarias para mejorar diagnósticos y tratamientos, la falta de ambulancias y la falta de mantenimiento de las existentes, hacen el panorama mucho más sombrío”.
En la misma línea plantea que “los hospitales de la provincia se ven superados por derivaciones de los nosocomios del interior” y ejemplifica que “por ejemplo el Hospital Zonal Complejidad VI Cutral Co - Plaza Huincul se ve desbordado ante la falta de profesionales y espacio físico adecuado para realizar la atención que el paciente merece”.
Finalmente puntualiza: “Por lo expuesto, los integrantes de este Cuerpo Deliberativo solicitamos con suma urgencia la Emergencia Sanitaria del Sistema de Salud Pública de la Provincia del Neuquén. Ante este escenario; se debe contar con una herramienta que permita dar respuestas ágiles y eficientes a los ciudadanos neuquinos, ya que la gran mayoría de las personas usuarias de nuestros hospitales, no cuentan con cobertura social, más si consideramos que dentro de esta franja, hay un porcentaje de pacientes de alta vulnerabilidad social. Readecuar las partidas presupuestarias necesarias para el normal funcionamiento de los servicios. Priorizar la designación de profesionales y técnicos en aquellos lugares donde hubiere faltantes”.