En una audiencia realizada hoy en la Ciudad Judicial, el fiscal del caso Juan Manuel Narvaez formuló cargos a tres varones por formar parte de una asociación ilícita dedicada a sustraer hidrocarburos a la empresa petrolera Plus Petrol, a la que le provocaron un perjuicio patrimonial superior a 1.5 millones de dólares.

Se trata de L.O.M, E.D.J y F.S.O, y los delitos que el fiscal del caso les atribuyó son asociación ilícita en concurso real con hurto -124 hechos-, todo en carácter de coautores (artículos 210, 162, 45 y 55 del Código Penal).

Narvaez también requirió que se declare el caso como complejo. Argumentó que “nos encontramos ante pluralidad de hechos” y precisó que “con el avance de la investigación, tenemos la certeza de que hay otras personas involucradas y más hechos”.

Según la teoría del caso que presentó el representante del Ministerio Público Fiscal, los imputados llevaron adelante las conductas delictivas entre el 1 de julio de 2021 y el 13 de septiembre de 2022. Para ello, aprovecharon sus roles laborales siendo E.D.J y F.S.O, choferes de una empresa de transporte de hidrocarburos y L.O.M, operador de descarga en la planta denominada “Centenario”, ubicada en la Autovía Norte de la ciudad de Neuquén y perteneciente a Plus Petrol.

La mecánica utilizada por los involucrados, que describió el fiscal del caso, constaba de ocho pasos:

- El primero consistía en que E.D.J y F.S.O, cada uno conduciendo el camión que le fuera asignado por la firma para la que trabajaban, que prestaba servicios para Plus Petrol, trasladaban el crudo desde los yacimientos Tratayen, Loma Jarillosa y Puesto Silva, ubicados en la Provincia del Neuquén. El destino era la planta Centenario, ubicada en calle Conquistadores del Desierto, kilómetro 12, de la Autovía Norte de la ciudad de Neuquén, donde debían descargar el crudo para que fuera tratado e inyectado a un oleoducto. El traslado final era a Puerto Rosales en Bahía Blanca, Provincia de Buenos Aires.

- El segundo paso que realizaban E.D.J y F.S.O, al ingresar el camión con petróleo a la planta Centenario, era dirigirse a la oficina administrativa de la planta con el remito de transporte, que enviaba el remitente del cargamento. Allí, un empleado administrativo de Plus Petrol verificaba la habilitación comercial del transportista para que éste pudiera proceder con la descarga. Luego, los choferes conducían el camión hacia la isla de descarga.

- El tercer paso se realizaba una vez sorteado el trámite administrativo. Comenzaba la puesta en escena tendiente a simular la descarga del crudo en la isla pero que, en realidad, no se realizaba. Para ello intervenía L.O.M, quien trabajaba para una empresa contratada para prestar servicios de operación y mantenimiento en la planta, de la Planta Centenario. Los dos choferes se aseguraban que siempre fueran atendidos exclusivamente por éste operador. L.O.M realizaba un chequeo de seguridad y tomaba una muestra del fluido transportado para su verificación en el laboratorio de la planta. Pasados unos minutos y una vez obtenidos los resultados del análisis, volcaba la información en una planilla y, si estaba todo en orden, procedía a acompañar al camión y a su chofer a ubicarse en la isla de descarga correspondiente.

- El cuarto paso sucedía una vez que el camión estaba estacionado en la isla de descarga. Allí, L.O.M, E.D.J y F.S.O –según el caso- conectaban mangueras desde el vehículo hasta las bocas de conexión. El operador simulaba accionar las bombas de descarga que debían evacuar el petróleo del camión hacia un tanque ubicado allí. Este procedimiento de descarga del producto era medido a través de un instrumento de medición monitoreado desde la sala de control de la planta.

- El quinto paso consistía en aparentar que la descarga completa se estaba realizando, por lo que los imputados esperaban entre 45 minutos y 1 hora aproximadamente. Una vez finalizada la simulación de la descarga, el operador y el chofer desconectaban la manguera y retiraban el camión de la isla.

- En el sexto paso, L.O.M completaba con información falsa la planilla del laboratorio, consignando los datos de volumen inicial y final “leídos” en el medidor, que claramente era información falsificada, por cuanto no había existido descarga alguna. Luego firmaba el remito que había traído el camionero y se quedaba con una copia. De este modo, permitía que E.D.J y F.S.O se retiraran con el camión cargado de petróleo.

- El séptimo paso le daba un cierre al procedimiento, ya que L.O.M concluía completando el libro de novedades con los datos de la supuesta descarga, reuniendo la lista de chequeo, la planilla de laboratorio y la copia del remito. Luego dejaba toda esa documentación en el tráiler de la oficina de la planta para su registro y archivo, tarea realizada por el personal administrativo de Plus Petrol.

- El octavo y último paso consistía en la apropiación del petróleo sustraído. Para finalizar con toda la maniobra delictiva, E.D.J y F.S.O trasladaban los camiones hacia una chacra ubicada en Barrio Valentina Sur de la ciudad de Neuquén. Allí, otros dos varones que están siendo investigados, aportaban el espacio del predio para que pudieran trasvasar el petróleo y apropiarse de él.

El fiscal Narvaez explicó que fue de esa manera que “los imputados montaron una asociación ilícita, cumpliendo todos ellos un rol indispensable en la misma y con la finalidad de sustraer petróleo de la empresa Plus Petrol”. Además, detalló que “utilizaron este modo de operación en al menos 124 oportunidades durante el período de tiempo antes mencionado”. Finalmente puntualizó que el perjuicio económico para la empresa fue de 1.539.698,13 dólares y el total de petróleo sustraído 3857,5 metros cúbicos.

Los abogados particulares que intervinieron como querellantes en representación de la empresa, adhirieron al requerimiento de la fiscalía, tanto en la descripción de los hechos, la calificación legal atribuida y también la solicitud de declaración de causa compleja.

El juez de garantías que estuvo a cargo de la audiencia avaló el pedido de las partes acusadoras y dio por formulados los cargos. Además, el magistrado declaró el caso como complejo y fijó el plazo para concluir la investigación en un año.

Durante la audiencia, el fiscal Narvaez contó con la asistencia de la funcionaria de la fiscalía de Delitos Económicos Tanya Cid.