La persona que atacó a la Vicepresidenta fue identificado como Fernando Andre Sabag Montiel, un hombre de 35 años y de nacionalidad brasileña que en los últimos tiempos tuvo diversas apariciones en medios de comunicación, interviniendo en móviles en vivo con fuertes críticas al Gobierno nacional.
Utiliza el apodo de "Salim", en sus redes sociales y tiene tatuajes con referencias nazis. "Ni Milei ni Cristina", remata en un posteo. En otra publicación refiere a haberse tatuado una "cruz gamada", un símbolo nazi y un sol negro que se le vio en el hombro se asemeja también a una iconografía utilizada por las temibles SS, el escuadrón criminal que sirvió a Adolf Hitler.
El agresor es ecléctico en redes. Le había dado "me gusta" a consumos como "cabala cristiana", "capricornio", "alquimia" o "antropología gnóstica", mezclado con "aprendizaje gastronómico".
Seguidor de cierto rock pesado, lucía su look con pulseras y anillos plateados. Publicó también un video con Taylor Hawkins de Foo Fighters una semana antes de morir, me siento la parca, fue muy fuerte conocer a alguien antes de su muerte", decía el texto que, bajo el nombre del usuario Fernando_salim13, Fernando André Sabag Montiel, publicó en su cuenta junto a un video con el fallecido baterista estadounidense.
Tras el atentado, los investigadores encontraron un total de 100 proyectiles calibre 9 milímetros en una vivienda del partido bonaerense de San Martín, donde residía Fernando Andre Sabag Montiel. Los proyectiles fueron hallados repartidos en dos cajas de 50 cada una, en una vivienda situada en Uriburu al 700 de ese partido bonaerense, que Sabag Montiel alquilaba desde hacía ocho meses como vivienda particular.
Antecedentes penales
La detención de 2021 se produjo en la avenida San Martín al 2800, en el barrio de Agronomía cuando un oficial de la fuerza porteña observó estacionado en la vía pública un automóvil Chevrolet Prisma de color negro que no poseía patente trasera.
Ante esa situación, el policía identificó a un hombre que dijo ser su dueño y que indicó que el faltante de la patente trasera se debía por un choque de tránsito ocurrido días atrás, dijeron las fuentes.
En ese momento, cuando el hombre abrió la puerta del auto para buscar documentación del vehículo, se le cayó un cuchillo de 35 centímetros de largo, justificando que lo llevaba para defenderse.