Imagen
La comunidad universitaria ha convocado a dos días de inactividad total este martes 21 y miércoles 22 de octubre en todas las casas de altos estudios del país. La medida de fuerza es una protesta directa contra la falta de promulgación y puesta en vigor de la Ley de Financiamiento Universitario, un proyecto reafirmado por el Congreso a principios de mes y que posteriormente fue vetado por el presidente Javier Milei.

El reclamo central del sector se ha mantenido constante, según explicó Diego Maita, referente del gremio ADIUNSa, en declaraciones a Aries. Maita detalló la grave situación salarial: "Durante todo el 2024 y 2025, el principal reclamo sectorial es la cuestión salarial, donde hemos sufrido una enorme pérdida... la pérdida acumulada desde que asumió Javier Milei equivale a más de seis sueldos en total". Esta situación ha escalado hacia una demanda más amplia relacionada con la asignación presupuestaria general para las universidades.

A diferencia de otras convocatorias, esta huelga de 48 horas no incluirá movilizaciones, una decisión táctica para evitar cualquier "malinterpretación" o confusión con el intenso proselitismo electoral que caracteriza la semana previa al cierre de la campaña.

El panorama gremial se muestra dividido: Maita confirmó que la CONADU Histórica sostiene el paro de dos días, mientras que la otra facción gremial de CONADU, que representa una cantidad equivalente de asociaciones, optará por una jornada de lucha con un solo día de cese de actividades. A esto se suma que los trabajadores del Hospital Garrahan en Capital Federal también se sumarán con un día de paro este martes 21.

Preocupación por la propuesta presupuestaria 2026

Los sindicatos también pusieron la lupa sobre el Proyecto de Ley de Presupuesto 2026, cuyo debate ya comenzó en las comisiones del Congreso. Maita calificó la propuesta del Ejecutivo como "profundamente preocupante", argumentando que está construida sobre "variables imaginarias".

Respecto a su ámbito, el referente sindical señaló que la pauta presupuestaria planteada constituye "nuevamente una pauta de ajuste". Sentenció: "nos parece no solo inaceptable, sino que es una provocación. Venimos discutiendo leyes para mejorar el presupuesto, esto es esta tozudez que uno ve en el Gobierno que no nos parece virtuosa".

Finalmente, Maita hizo un llamado a la "rectificación del rumbo" y a la "humildad" por parte del Gobierno, considerando el malestar generalizado en "un montón de sectores" de la sociedad.