La expedición submarina del CONICET en el Mar Argentino ha capturado la atención de miles de espectadores con el avistamiento de un extraño pez. La criatura, conocida como "pez trípode" por sus tres aletas alargadas, fue observada a más de 3.700 metros de profundidad en el Cañón de Mar del Plata, un área poco explorada de gran valor ecológico.
El hallazgo, que se transmitió en vivo por el canal de YouTube del Schmidt Ocean Institute, causó furor en las redes sociales debido a la peculiar apariencia y el fascinante comportamiento de la especie. El pez trípode pertenece al género Bathypterois y utiliza sus aletas para mantenerse inmóvil sobre el lecho marino, a la espera de que la corriente le acerque pequeños organismos para alimentarse.
Un fantasma del abismo
Las características físicas de este pez son una adaptación perfecta a su hábitat extremo. Sus aletas, que pueden medir hasta 40 centímetros, le permiten sostenerse en un entorno de oscuridad total y altísimas presiones. Con un cuerpo gelatinoso y translúcido, el pez trípode tiene un aspecto fantasmal y es tan difícil de estudiar que sigue siendo una gran rareza para la ciencia.
Los científicos del CONICET, utilizando tecnología de observación remota, buscan clasificar especies y comprender la riqueza biológica de estas zonas abisales. La información obtenida en estas misiones es crucial para desarrollar políticas de conservación y gestionar de manera sostenible los recursos naturales del país. La transmisión en vivo no solo ha acercado la ciencia al público, sino que también ha generado una conexión efectiva entre la comunidad científica y la sociedad en general.