Las víctimas fatales se dieron por el derrumbe del club Bahiense del Norte. Las autoridades confirmaron que se inició la remoción de escombros en el lugar.
Al menos 13 personas murieron este sábado al derrumbarse parte de la estructura del club Bahiense del Norte a raíz de un fortísimo temporal de viento, granizo y lluvias, mientras otras catorce permanecían esta noche internadas en grave estado y hubo lesionados en distintos barrios de la ciudad bonaerense de Bahía Blanca, donde además se registraron voladuras de techos y gran parte del distrito quedó sin energía eléctrica.
Frente a la situación, calificada como de "desastre" por la Municipalidad, de inmediato se conformó un Comité de Crisis, con intervención de la comuna y el gobierno de la provincia de Buenos Aires.
Asimismo, el Gobierno nacional indicó que monitorea "la delicada situación generada por la tormenta eléctrica en la provincia" y trabajaba "en conjunto con las autoridades provinciales y municipales en la asistencia de las víctimas y en el control de daños".
El presidente Javier Milei expresó "su más sentido pésame a familiares y amigos de los fallecidos a causa de la tormenta", así como la vicepresidenta Victoria Villarruel manifestó su pesar en las redes sociales.
"En el operativo de emergencia trabajan 30 agentes de Defensa Civil, 120 efectivos de la Policía Bonaerense, 46 bomberos, 40 agentes de tránsito, 17 trabajadores de emergencias médicas, junto a todos los funcionarios del gobierno municipal", detalló la comuna.
El parte médico, según la última actualización consultada por Télam, indicó que hubo "13 personas fallecidas y 14 internados de gravedad: ocho de ellos en el Hospital Municipal, cuatro en el Hospìtal Penna y dos en el Hospital Privado del Sur".
Además, las fuentes comunales indicaron "se continúa trabajando en la remoción de escombros en las instalaciones del Club Bahiense del Norte", ante la eventualidad de hallar personas atrapadas, debido a que a la hora del fenómeno meteorológico se preparaba una fiesta de fin de año del patín artístico de la entidad ubicada en Salta 28.
Por otra parte, la comuna bahiense precisó que habilitó como centros de evacuación las instalaciones del Club Olimpo y el Dow Center, registrando hasta el momento 89 personas alojadas en ambos lugares.
Mientras, el servicio de electricidad había dejado de operar en la mayor parte de la ciudad por daños graves ocasionados por el temporal y la empresa Edesa no pudo precisar tiempo de restablecimiento del mismo.
Esta circunstancia, ha derivado en que las comunicaciones con los servicios de emergencias se encuentran colapsadas. Y por lo tanto, se solicitó a la comunidad "permanecer en sus hogares y no circular por la vía pública".
Ante el temporal, la Oficina del Presidente de la República Argentina también pidió a los pobladores "revisar el servicio meteorológico" para chequear el sistema de alertas que rige para su zona "y, de ser necesario, permanecer en sus casas durante la madrugada".
Por su parte, el intendente Federico Susbielles expresó que "frente a la catástrofe que enfrentamos en la ciudad, todo el equipo de gobierno, junto a Policía, Defensa Civil, Tránsito, Bomberos, Servicio Siempre y Ejército, estamos trabajando para asistir a quienes lo necesitan".
En un mensaje a la población, difundido en la red social X, el jefe comunal indicó que "desde el primer momento, junto al Comité de Crisis, mantenemos informada a la población mediante los canales oficiales del municipio y los medios de comunicación".
"Con muchísimo dolor, se confirmaron hasta el momento 13 víctimas fatales", señaló Susbielles.
En tanto, voceros de la Armada Argentina precisaron que el temporal afectó a la Base Naval Puerto Belgrano, con caída de árboles en sus instalaciones y el corte del suministro eléctrico.
Defensa Civil, ambulancias del Siempre y servicios privados, tránsito, policía y bomberos trabajaban esta noche en el club donde, según fuentes consultadas por Télam, se inició la remoción de escombros para comenzar a liberar a las personas que se encuentran atrapadas y solicitaron a la población no acercarse y permanecer en sus hogares.