El senador justicialista José Mayans anunció una iniciativa que busca declarar al sistema nuclear argentino como un “bien público estratégico, no enajenable”. El objetivo es prevenir su privatización y garantizar que su control y desarrollo sigan en manos del Estado, citando razones de soberanía y seguridad nacional.
El legislador, en una moción de preferencia durante la sesión del jueves pasado, calificó los recientes anuncios del Gobierno sobre la privatización del sector como "verdaderamente gravísimos".
Mayans subrayó que la propuesta cuenta con el apoyo de distintos bloques en ambas cámaras del Congreso. "Vamos a declarar el sistema nuclear argentino como un bien público estratégico no enajenable, por lo que representa", afirmó, destacando que "ahí hay información que es estratégica" y que proyectos como el CAREM, el primer reactor nuclear de potencia pequeño y modular de diseño 100% argentino, son de valor incalculable. "El proyecto CAREM es un proyecto estratégico para el país. La Coca Cola no te vende su fórmula, imagínense lo que es el CAREM, que es un sistema prácticamente único a nivel mundial", enfatizó.
El senador de Fuerza Patria remarcó que la medida es crucial para la seguridad, ya que no se pueden permitir "errores del tipo privado que digan nos equivocamos y tuvimos emisión radioactiva porque no hubo inversión en esto o en lo otro".
Una historia de avances y retrocesos
El sueño de un reactor de potencia de diseño completamente nacional se remonta a la década de los 80, cuando el CAREM fue la primera propuesta de SMR (Small Modular Reactor) en el mundo. Sin embargo, su desarrollo ha enfrentado múltiples obstáculos a lo largo de los años.
El proyecto sufrió su primer parate a principios de los años 90 y, tras un breve relanzamiento a finales de esa década, fue detenido nuevamente durante el gobierno de Fernando de la Rúa. Con la llegada de Néstor Kirchner a la presidencia, el Plan Nuclear Argentino fue relanzado y el proyecto CAREM se retomó con fuerza.
A pesar de una década de avances, la administración de Mauricio Macri lo paralizó en 2017. Con la llegada de Alberto Fernández, la iniciativa se reanudó tras la pandemia, pero el actual gobierno de Javier Milei no solo lo detuvo una vez más, sino que parece dispuesto a “boicotearlo para hundirlo de manera definitiva”.
Ante este panorama, la declaración legislativa del sistema nuclear como un bien estratégico busca ofrecer una protección permanente que garantice su continuidad y desarrollo, independientemente de los cambios de gobierno y las fluctuaciones de la política económica. El proyecto busca reafirmar el compromiso del Estado con una política nuclear que es considerada vital para la soberanía y el futuro tecnológico de Argentina.