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Un homicidio estremecedor conmociona a la provincia de Santiago del Estero tras la detención de una mujer, acusada de terminar con la vida de su hija de 9 años. María de los Ángeles Russo fue aprehendida luego de admitir a los agentes policiales haber provocado la muerte de la menor, identificada como Diana, mediante una sobredosis de pastillas.

El suceso se investiga en la ciudad de La Banda, Santiago del Estero, donde la acusada se encontraba con su hija y sus padres.

Hallazgo Sombrío y Confesión Gélida

La intervención policial en la residencia de la calle Irigoyen al 500 reveló una escena desoladora. Diana fue encontrada sin vida, yaciendo en su cama. Los primeros peritajes forenses indican que el deceso no superaría las ocho horas previas al hallazgo, sugiriendo que la ingesta de los fármacos habría ocurrido entre la noche y la madrugada.

Lo que verdaderamente impactó a los efectivos que ingresaron al domicilio fue la extraordinaria frialdad y el aparente estado de imperturbabilidad de la madre. Al ser consultada sobre lo ocurrido, la mujer confesó con total pasividad el hecho, revelando que le había administrado Clonazepam a la niña durante la noche.

Historial clínico bajo la lupa Judicial

El caso quedó inmediatamente en manos de la fiscal Natalia Saavedra, quien ha destacado la necesidad de chequear y contrastar la vasta información disponible. El resultado de la autopsia es considerado fundamental para confirmar la causa de la muerte y establecer la figura penal exacta que pesará sobre la detenida.

Mientras la Justicia avanza, se conocieron detalles del historial de María de los Ángeles Russo. Testimonios de familiares y vecinos indicaron que la mujer había sido ingresada en el pasado a centros psiquiátricos en múltiples ocasiones. Sin embargo, su falta de adherencia a los tratamientos ambulatorios era una constante. Aunque se registraban antecedentes de "episodios", las personas cercanas a la familia aseguran que jamás había manifestado violencia contra su hija.

La cuadra donde ocurrió el horror se convirtió en un centro de operaciones judiciales, con la presencia de patrulleros, equipos de Criminalística y la unidad de traslado forense.