Una manifestación de jubilados frente al Congreso, convocada para expresar su rechazo al ajuste del gobierno de Javier Milei, derivó este miércoles en un desproporcionado operativo de seguridad que incluyó el uso de la fuerza. Al menos siete personas fueron detenidas y se registraron varios heridos, en un episodio que captó la atención de los medios por la dureza de la intervención policial.
Minutos antes de las 17:00, la Policía Federal utilizó un camión hidrante y disparó balas de goma para dispersar a los manifestantes, muchos de ellos adultos mayores. Imágenes televisivas mostraron escenas de personas lesionadas y empujadas.
"Estamos acá concentrados en el Congreso vallado, los jubilados como todos los miércoles. Esta vez reclamamos contra el veto que está tratando de preparar Milei, buscando comprar votos para garantizar que salga favorable cuando vuelva a Diputados", explicó a la prensa Nora Biaggio, del Plenario de Trabajadores Jubilados. La referente hacía alusión al anunciado veto de Milei a la ley que aprobaba un aumento de haberes para el sector. "Vamos a denunciar fuertemente que, de no estar esto del veto, ya se estaría cobrando $20.000 de aumento con los haberes de agosto. Todo esto dilata el cobro de una cifra que, aunque es muy pequeña, realmente es necesaria", agregó Biaggio.
Escenas de represión y detenciones
A media tarde, un grupo de manifestantes intentó avanzar por Avenida de Mayo hacia Plaza de Mayo. Fue en ese momento cuando comenzó la represión. El saldo incluyó siete detenciones, varios heridos y la dolorosa imagen de adultos mayores siendo empujados al suelo, arrastrados por agentes y asistidos por otros participantes de la protesta.
Aunque la versión oficial argumenta que los efectivos actuaron "ante agresiones y objetos contundentes", videos y testimonios recogidos en el lugar sugieren una intervención desproporcionada frente a un reclamo que se desarrollaba de manera pacífica.
El operativo se concentró en el cruce de Avenida de Mayo y Montevideo, donde una columna de al menos cien personas fue interceptada por la policía, que les exigía liberar los carriles. En medio de los forcejeos, se produjeron las detenciones. Organismos de derechos humanos denunciaron que algunos manifestantes fueron marcados con pintura para facilitar su identificación posterior. Además, se impidió el ingreso a las inmediaciones del Congreso a cualquier persona que no fuera legislador, trabajador acreditado o prensa.
Ataque a la prensa
La represión policial también alcanzó a los trabajadores de prensa que cubrían la manifestación. Durante una transmisión en vivo de C5N, se registró el momento en que un efectivo de la Policía Federal dispara una bala de goma directamente a un periodista del canal, evidenciando la escalada de violencia en el operativo.