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Una impactante y peligrosa escena se vivió este miércoles en pleno Metrobus de Neuquén capital, donde cuatro adolescentes fueron filmados mientras se desplazaban colgados de la parte trasera de un colectivo urbano en movimiento. El preocupante hecho fue registrado en video por una vecina, Natalia, quien rápidamente dio aviso al conductor de la unidad.

Según relató Natalia, los jóvenes permanecieron en esta arriesgada posición durante al menos cinco cuadras, utilizando un pequeño borde del colectivo para intentar sostenerse. "Era un espacio muy chico, los pies les quedaban afuera y no tenían de dónde agarrarse bien. A la menor frenada podrían haber terminado en el asfalto", explicó la testigo, visiblemente preocupada por el potencial desenlace fatal.

El colectivo, que circulaba con vía libre por el Metrobus, no llevaba otro vehículo detrás, lo que lamentablemente facilitó que la situación pasara desapercibida para el chofer. Al tratarse de una unidad sin ventanilla trasera ni cámara de vigilancia que apunte hacia atrás, el conductor no tenía visibilidad de lo que ocurría en la parte posterior. Fue solo gracias al aviso de un pasajero que descendía que el chofer detuvo la marcha, descendió de la unidad y, al percatarse de la situación, los adolescentes emprendieron la huida a toda velocidad.

Un riesgo latente que pone las vidas en peligro

Desde diversos sectores se ha remarcado el extremo peligro que implican este tipo de maniobras, no solo para los menores involucrados, sino para toda la unidad y para quienes circulan en las cercanías. "Un frenazo, un bache o un giro imprevisto pueden terminar en tragedia", insistieron los conductores del móvil, subrayando la imprevisibilidad de un incidente de esta naturaleza.

Natalia también advirtió que, si bien este comportamiento no era común en la zona, podría estar replicándose en otros puntos de la ciudad, al igual que sucedía en otros contextos con jóvenes que se subían a trenes de carga. La falta de sanciones directas o marcos normativos específicos para prevenir estos actos complica aún más el abordaje institucional de la problemática.

Ante esta situación, se ha planteado la urgente necesidad de reforzar la concientización en la población joven, mejorar los sistemas de monitoreo en el transporte público y generar campañas específicas dirigidas a adolescentes. El objetivo es claro: evitar que estas "diversiones" deriven en consecuencias fatales.

"Esto no es una travesura, es un riesgo real de vida. Los chicos no dimensionan el peligro y los choferes no pueden prevenir algo que no ven", concluyó Natalia, poniendo de manifiesto la complejidad de una problemática que requiere de la atención de toda la comunidad.

Debate sobre seguridad y responsabilidad

La difusión de este video reabre el debate sobre la seguridad en el transporte público, la visibilidad que tienen los choferes al mando de las unidades, la efectividad y el alcance de las cámaras urbanas de vigilancia, y la responsabilidad de los adultos en la prevención de estas conductas riesgosas por parte de los menores. ¿Qué medidas adicionales podrían implementarse para evitar que situaciones como esta se repitan?