Adrián Simancas, un joven kayakista fue tragado por unos segundos por una ballena que, un instante después lo escupió. Además, del tremendo susto le quedó un recuerdo difícil de olvidar.

El joven kayakista paleaba en aguas del Estrecho de Magallanes. Estaba acompañado por su padre quien filmaba todo lo que ocurría. El caso es que repentinamente una ballena jorobada, hizo el típico movimiento para alimentarse tomando con su boca abierta al máximo, gran cantidad de agua para filtrar de allí, el krill. Sin embargo, estaba el hombre con su kayak que fue cayendo hacia adentro de la boca y desapareció por completo de la superficie del mar.

Instantes después emerge el kayakista increíblemente consciente y a salvo, sin rasguño alguno aparentemente.

Todo quedó filmado por el padre del muchacho y el video voló por las redes sociales.

En las imágenes se observa como el mar está embravecido y llueve. El joven avanza con un kayak amarillo cerca de Punta Arenas.

Adrián Simancas, es un joven analista, programador y músico de 24 años. “Veo entre azul y blanco que me pasa cerca de la cara y está como por un lado y por encima. No entendía qué estaba pasando y entonces todo me hundo... pensé que me había comido”, dijo en diálogo con 24 Horas, de la TV de Chile.

El padre, en tanto, explicó que “no vi a Adrián por tres segundos y me asusté. Cuando volteo no veo nada, no veo a Adrián. Ese fue el único momento de susto realmente que tuve, porque no lo vi como por tres segundos. Y de repente sale así como disparado”.