Al lago Traful se puede acceder en una embarcacin o practicando buceo Foto Prensa

El Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación seleccionó a esta aldea de montaña para representar al país en la convocatoria "Best Tourism Villages". Buceo en el bosque sumergido, caminatas y paseos en kayak son algunos de los atractivos de la villa, desde donde se pueden admirar las figuras del volcán Lanín y del Villarrica.

Por Daniela Posolda

Majestuosos bosques y aguas cristalinas caracterizan a Villa Traful, la pequeña y pintoresca aldea de montaña ubicada en Neuquén, y que fue recientemente seleccionada por el Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación para representar al país en la convocatoria "Best Tourism Villages", impulsada por la Organización Mundial del Turismo (OMT).

Villa Traful, junto a La Carolina (San Luis), Gaiman (Chubut), Laguna Blanca (Catamarca), Tolhuin (Tierra del Fuego), Los Antiguos (Santa Cruz) y Yavi (Jujuy), fueron las siete localidades argentinas que cumplieron con los requisitos necesarios para participar de la convocatoria internacional.

El expresidente de la Administración de Parques Nacionales, Exequiel Bustillo, fundó la villa neuquina el 30 de noviembre de 1936, fecha en la que se conmemora el aniversario del pueblo, que forma parte del Parque Nacional Nahuel Huapi y actualmente tiene cerca de 1.000 habitantes.

Uno de los principales atractivos de la villa es el bosque sumergido, que se originó en 1960 por el desplazamiento de masa rocosa, ya que se encuentra en una unión de placas tectónicas.

El pueblo tiene actualmente cerca de 1000 habitantes Foto Prensa

Los ejemplares de gigantescos cipreses permanecen en pie y las copas de los más altos emergen desde la profundidad hacia la superficie del lago Traful, al que se puede acceder en una embarcación o practicando buceo.

La belleza del paisaje que se encuentra debajo del agua parece ser producto de la imaginación, ya que se trata de un bosque cordillerano con variedad de peces que habitan entre los árboles.

Por otra parte, Villa Traful atrae a quienes practican pesca deportiva con modalidades como spinning, trolling, casting y fly casting, que llegan a la villa con la intención de capturar salmones y truchas, entre otras especies.

La devolución de los ejemplares es obligatoria durante toda la temporada de pesca, en busca de proteger la fauna ictícola del lugar.

Otras actividades que realizan quienes visitan Villa Traful son trekking, mountain bike, paseos en kayak y cabalgatas para disfrutar con amigos y en familia.

En tanto, las propuestas gastronómicas también son abundantes, y los turistas pueden degustar variados y deliciosos platos regionales en casas de té, cervecerías, parrillas y restaurantes.

Además, la localidad cuenta con miradores que ofrecen vistas imponentes y permiten admirar las figuras del volcán Lanín (del lado argentino) y del Villarrica (del lado chileno).

"Somos una aldea de montaña que mantiene su magia y la energía que brindan sus bosques, cascadas y el maravilloso lago Traful", dijo a Télam el referente de la asociación de hoteleros de la villa, Mariano Pestchanker.

Uno de los principales atractivos de la villa es el bosque sumergido Foto Prensa

Asimismo, describió a Villa Traful como "un oasis en medio de ciudades como Bariloche, Villa La Angostura y San Martín de los Andes" y afirmó que "es el lugar ideal para desconectarse y volverse a conectar con uno mismo".

La localidad se encuentra en la Cordillera de los Andes, en el departamento Los Lagos, a 404 kilómetros de la ciudad de Neuquén y, en auto, se puede acceder por las rutas nacionales 22 y 237, tomando luego la ruta provincial 65.

Por la Ruta de los Siete Lagos se deben recorrer alrededor de 40 kilómetros desde Villa La Angostura o 70 kilómetros desde San Martín de los Andes, hasta el cruce que lleva a Villa Traful.

Para quienes prefieren viajar en avión, los aeropuertos más cercanos son el de Chapelco, -al que llegan vuelos desde Buenos Aires y desde la ciudad brasileña de San Pablo- y el de la localidad rionegrina de Bariloche, que se encuentra a 100 kilómetros de la localidad.

El pueblo de ensueño, nominado recientemente por la OMT, es el destino ideal para los amantes de la naturaleza que elijen deleitarse con paisajes cordilleranos y descansar de las rutinas urbanas.

Las 526 plazas habilitadas del pequeño poblado se presentan en un amplio abanico de alojamientos para todos los gustos, desde la máxima categoría a orillas del lago, como es el caso del hotel Alto Traful, con piscina, jacuzzi, sauna y gastronomía gourmet, hasta hosterías, cabañas y una variedad de campings con dormis incluidos.

Para los visitantes que quieran vivir el contacto con la naturaleza pero sin perder intimidad, brinda una propuesta de glamping con seis domos en los que se diluye el límite entre el paisaje y el refugio.