La provincia fue seleccionada, junto a Tucumán y Misiones, para formar parte del Proyecto Readiness. El objetivo es estimar la emisión de gases efecto invernadero en establecimientos de salud y elaborar un plan de acción sobre cambio climático y salud.
La provincia del Neuquén fue seleccionada, junto a Tucumán y Misiones, para conformar mesas de trabajo y estimar las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) del sector salud, además de implementar un plan de acción sobre el cambio climático. Dado que Argentina tiene un gran territorio, diversos ecosistemas y microclimas, y la información en relación a los diversos impactos del cambio climático en la salud es limitada es que se puso en marcha el Proyecto Readiness, del que nuestra provincia participará mediante la conformación de una mesa provincial de cambio climático y salud y estimaciones de GEI en el Hospital Provincial Neuquén (el establecimiento sanitario de mayor complejidad), entre otras acciones.
La ministra de Salud Andrea Peve participó del lanzamiento del proyecto que se realizó a nivel nacional en el Centro Cultural Kirchner, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, para fortalecer al sector de salud en las acciones de mitigación y adaptación al cambio climático.
El abordaje de la acción climática es una política pública del gobierno de la provincia del Neuquén y del ministerio de Salud de la provincia, destacada en el Plan Provincial de Salud 2019-2023, y que necesita de la participación de todas y todos, debido a que la salud ambiental engloba factores externos que pueden incidir en la salud de una persona desde antes de nacer, por lo que crear ambientes propicios para la salud es una acción fundamental para la prevención de enfermedades.
Peve sostuvo que la salud ambiental es un eje transversal de trabajo para nuestro gobernador Omar Gutiérrez y por ende para la cartera sanitaria. “Que la provincia haya sido elegida para formar parte de este proyecto en la estimación de emisión de gases efecto invernadero dentro del Sistema de Salud es una gran oportunidad para analizar nuestras prácticas y su impacto, y gestionar esa información en pos de desarrollar políticas públicas que contribuyan a reducir los riesgos para la salud relacionados con el clima”, indicó.
El Proyecto Readiness es coordinado por el ministerio de Salud de la Nación, la Oficina de OPS/OMS Argentina y la Dirección Nacional de Financiamiento con Organismos Internacionales de Crédito (NDA Argentina), con financiamiento del Fondo Verde del Clima. El objetivo es fortalecer la gobernanza del cambio climático y salud en la escala subnacional a partir de la conformación de mesas de trabajo provinciales, y mejorar los mecanismos de coordinación con el nivel nacional para respaldar los planes, estrategias y programas de cambio climático y salud.
Dicha iniciativa se enmarca en las acciones de la Secretaría de Cambio Climático, Desarrollo Sostenible e Innovación de Nación, cuya función principal es coordinar la implementación del Plan Nacional de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático (Ley 27.520).
Para llevar adelante el proyecto se seleccionaron estratégicamente tres provincias: Neuquén (región Patagonia), Tucumán (región noroeste/NOA) y Misiones (región noreste/NEA). En nuestro territorio, la conformación de la mesa de Cambio Climático y Salud tendrá alcance provincial y desde la que se realizará la estimación de GEI en el HPN y se capacitará al personal sanitario, con la intención de que pueda replicarse posteriormente en otros efectores.
Actualmente, el ministerio de Salud de la provincia, a través del Departamento de Salud Ambiental, la Oficina de OPS/OMS Argentina, Ministerio de Salud de la Nación y los consultores externos, trabaja para empezar a generar una línea de base y conocimiento sobre la temática.
En esta primera instancia, que durará 8 meses, se conforman los equipos con el objetivo de establecer una mesa de trabajo provincial y un plan de acción sobre cambio climático y salud que aborde las brechas de capacidad y vulnerabilidades, mediante consultas y participación de toda la sociedad, en línea con los planes y estrategias nacionales.
Para comprender la relevancia de la propuesta, Horacio Trapassi, jefe del Departamento de Salud Ambiental y coordinador local del proyecto, explicó: “Con esta iniciativa se busca estimar -por primera vez en Argentina- en Misiones, Tucumán y Neuquén como provincias pilotos, las emisiones de GEI del sector Salud”. En este sentido, Trapassi explicó que para ello se conformará una mesa de cambio climático y salud con todos los actores correspondientes de la provincia.
“Para nosotros es una gran oportunidad que nos va a permitir dejar una capacidad humana instalada y empezar a sensibilizar sobre la temática al personal”, reflexionó el coordinador y destacó: “Salud debe ser resiliente, es decir, tener la capacidad de adaptarse, mitigar y reducir la huella de carbono, mientras persiste operativa ante eventos climáticos extremos”.
Entre los objetivos propuestos se busca generar datos de referencia y aumentar los conocimientos dentro del sector salud. Se pretende contribuir a reducir los riesgos para la salud relacionados con el clima, a través de la implementación de medidas de promoción y protección de la salud, por lo que se estimarán las emisiones de carbono de los establecimientos de salud y se propondrán estrategias e intervenciones para su reducción.
En este sentido, Trapassi indicó: “El cambio climático es una cuestión de salud pública, porque afecta de distintas maneras la salud de las personas y es necesario que todos los sectores de los establecimientos sanitarios tomemos conciencia del impacto”.
Actualmente, muchas patologías tienen relación con el cambio climático y por este motivo, desde salud pública, es necesario continuar con la prevención, diagnóstico y tratamiento, y a la vez adaptarse para atender todo lo nuevo que pueda aparecer.
¿Qué son los gases efecto invernadero y la huella de carbono?
Los Gases Efecto Invernadero (GEI) son: metano, dióxido de carbono, óxido nitroso, clorofluorocarbonos, hidrofluorocarbonos y hexafloruro de azufre. Estos gases se generan mediante actividad económica, sanitaria, transporte, producción de alimentos, entre otros, y van quedando en la atmósfera, impidiendo que el calor del planeta pueda liberarse y comience a recalentarse. A esto se llama efecto invernadero.
Para poder comparar el impacto de cada uno de estos gases se utiliza una unidad común llamada “dióxido de carbono equivalente”, que se obtiene mediante un cálculo que toma en cuenta el potencial de cada gas para calentar el planeta. De esta forma, los gases pueden convertirse en “dióxido de carbono equivalente” y así realizar cálculos comparativos entre sí.
La huella de carbono es un indicador ambiental que pretende reflejar la totalidad de gases de efecto invernadero emitidos por efecto directo o indirecto de un individuo, organización, evento o producto.