El hecho ocurrió alrededor de las 5 de esta madrugada en la cuadra de la calle Uspallata al 3700 y la víctima fue identificada como Juan Carlos Fernández.
Un hombre de 48 años fue asesinado este lunes de al menos cuatro balazos frente a su esposa en el barrio porteño de Nueva Pompeya, cuando la defendió de un asalto y forcejeó con el delincuente que había interceptado a la mujer para robarle la cartera, informaron fuentes policiales y judiciales.
La víctima fue identificada por las fuentes como Juan Carlos Fernández (48), vecino de la zona y quien trabajaba haciendo mudanzas.
El hecho ocurrió alrededor de las 5 de esta madrugada en la cuadra de la calle Uspallata al 3700 del mencionado barrio de la zona sur de la Capital Federal, donde varios vecinos llamaron al 911 al escuchar detonaciones de un arma de fuego.
Personal de la comisaría vecinal 4B de la Policía de la Ciudad fue desplazado al lugar y, al llegar, los oficiales se encontraron con Fernández herido a balazos y, a su lado, a su esposa solicitando auxilio.
Si bien al lugar también arribó una ambulancia del SAME, el personal médico constató que el hombre ya había fallecido producto de al menos cuatro heridas de bala que presentaba en la cabeza, los hombros y debajo de una axila.
Fuentes policiales indicaron a Télam que el hecho ocurrió cuando la mujer se dirigía caminando a la parada de colectivos para ir a su trabajo en el Hospital Militar y fue abordada por un delincuente armado que intentó quitarle la cartera.
Su marido, que como todos los días la acompañaba hasta la parada del colectivo 133, se abalanzó sobre el ladrón, se produjo un forcejeo y luego el delincuente disparó varios tiros contra la víctima, tras lo cual se subió a una camioneta donde lo esperaba al menos un cómplice y ambos huyeron sin que hasta esta tarde hayan sido detenidos.
"El hombre reaccionó y forcejeó cuando el delincuente abordó a su pareja y ahí lo asesinaron", dijo a Télam uno de los investigadores de la causa.
Patricia, esposa de la víctima, contó esta tarde a la prensa cómo fue la secuencia del ataque.
"Estábamos saliendo, llegamos a la esquina, doblamos, mi esposo me venía diciendo que me apure porque estaba por venir el colectivo que tomamos y siento el revólver acá atrás", dijo la mujer señalando su nuca.
Patricia contó que el asaltante le dijo "dame todo" o algo similar, y que en ese momento su marido le gritó "Pato corré" o "Pato escondete" y le dio un empujón al ladrón, por lo que "empiezan a forcejear".
"(El ladrón) le pega un tiro y dice 'hijo de mil putas' y se va a donde estaba el auto, y le vuelve a disparar y ahí es cuando mi marido cae", recordó la esposa de la víctima entre lágrimas.
La mujer contó que el delincuente se subió a una camioneta "con vidrios polarizados", donde había al menos un cómplice que dio marcha atrás "con la puerta abierta" para buscar al asesino de su esposo, para rescatarlo y escapar.
Contó que con su marido llevaban en pareja 18 años, que tienen una hija adolescente, aunque también otros "hijos del corazón", y que Juan Carlos trabajaba haciendo "mudanzas y vendiendo ajo" y todas las mañanas la acompañaba a tomarse el colectivo a su trabajo en el Hospital Militar.
La mujer dijo que solo llevaba "la cartera y el celular", aunque ninguno de los dos elementos le fueron robados por la intervención de su marido.
También señaló que le llamó la atención que hoy no hubiera presencia policial como suele haber en la zona.
"Me extrañó que la policía no estuviera, porque siempre está a la madrugada", dijo al respecto.
Una de las hijas de la víctima dijo a la prensa que su papá "dio la vida" por su mamá y que intervino para "salvarla" del asalto.
"La tenía con el arma en la nuca y él para salvarla a ella fue que empezó a forcejear y le dispararon. Dio la vida por ella. Si no fuera por él, mi mamá no estaría viva hoy. Él era una persona de bien", afirmó la hija de Fernández.
El caso es investigado por la fiscal en lo Criminal y Correccional 54, Laura Belloqui, quien dispuso la intervención de la División Homicidios de la Policía de la Ciudad para intentar identificar y detener a los autores del crimen.
Fuentes del Ministerio de Justicia y Seguridad indicaron a Télam que ya se pusieron en contacto con la familia y que el cuerpo de psicólogos les está brindando asistencia.