
El operativo incluyó relevamientos sobre jornadas laborales, registración del personal y condiciones de higiene y seguridad. Se intimó a la empresa a regularizar distintas irregularidades detectadas.
La secretaría de Trabajo de la provincia llevó adelante una inspección integral en un local comercial recientemente inaugurado, a partir de diversas denuncias recibidas por parte de ex trabajadores y, posteriormente, de una denuncia formal presentada por el Centro de Empleados de Comercio vinculadas al cumplimiento de la normativa laboral vigente. El procedimiento fue realizado por personal de la Policía del Trabajo y del área de Higiene y Seguridad, con el objetivo de constatar las condiciones laborales y de seguridad en las que se desempeña el personal.

El secretario de Trabajo, Pablo Castillo detalló que “la inspección se hizo a primera hora de la mañana. Acudimos junto a la Policía de la provincia porque había mucha gente esperando para que abra el local. Les explicamos la situación y les pedimos paciencia, ya que no íbamos a permitir el ingreso hasta finalizar la inspección”.
Durante el relevamiento del personal, se constató que el local cuenta con 17 trabajadores y las jornadas laborales superaban el límite legal permitido, registrándose extensiones de hasta 12 horas diarias, de lunes a lunes, con un solo día de descanso semanal. Asimismo, se verificó que los trabajadores disponían únicamente de media hora para refrigerio y que el establecimiento no contaba con un espacio adecuado destinado a comedor para el personal.
“Las condiciones laborales no eran las normales. Por ejemplo, no pueden trabajar en un local que tenga un solo baño para todos los trabajadores, como habían denunciado públicamente algunas personas. Eso es real: había un solo baño, cuando mínimamente debería haber dos por piso”, agregó.
Se intimó a la empresa a dar cumplimiento, en un plazo de 24 horas, a la implementación de la planilla horaria conforme a lo establecido por la Ley N° 11.544, así como a presentar los compromisos de pago correspondientes a las horas extras trabajadas.

Castillo señaló que “además, uno de los testimonios de un trabajador nos resultó particularmente grave. Manifestó que, si querían pedir permiso para ir a comer, debían pagar una supuesta multa de 15 mil pesos. Todo esto resultó muy extraño”. “Cuando escuchamos eso resulta hasta vergonzoso que un empleador haga algo así con sus trabajadores.
Claramente no se puede hacer, va en contra de todos los derechos laborales y los trabajadores no deberían aceptarlo”. Aseveró que “si se comprueba que esto ocurrió, se trata de una falta grave. En ese caso, va directamente a una multa para el empleador, ya que constituye una violación grave al contrato laboral”.
En paralelo, el área de Policía de Higiene y Seguridad llevó adelante una inspección de las condiciones generales del establecimiento, donde se detectaron múltiples incumplimientos. Entre las principales observaciones se destacan la ausencia del libro del servicio de Higiene y Seguridad, la falta de identificación del responsable del área, la inexistencia del registro del programa de prevención y control de fuego, la carencia de botiquín de primeros auxilios y la falta de señalización obligatoria en los espacios de trabajo.
Además, se constató la ausencia de equipos de protección personal, deficiencias en el mantenimiento de las instalaciones eléctricas, extintores de fuego vencidos o inexistentes, falta de capacitación para el uso adecuado de la maquinaria y la inexistencia de registros de accidentes e incidentes laborales, junto con la escasa difusión de normas internas de seguridad.
Desde la secretaría de Trabajo se informó que se continuará con el seguimiento del caso para verificar el cumplimiento de las intimaciones realizadas, reafirmando el compromiso del organismo con la protección de los derechos laborales y la promoción de entornos de trabajo seguros y en condiciones dignas para las trabajadoras y los trabajadores neuquinos.
