El presidente Javier Milei confirmó su presencia en la cumbre de jefes de Estado del Mercosur, que se celebrará este sábado en Foz de Iguazú. Con un esquema de viaje relámpago, el mandatario argentino aterrizará en territorio brasileño para participar del plenario y regresará al país en la misma jornada, sin contemplar reuniones bilaterales en su itinerario oficial.
El reclamo de "flexibilización" como eje central
Bajo la premisa de que el bloque regional no debe funcionar como un "corsé" para sus miembros, Milei ratificará la postura que sostiene desde diciembre de 2023: la necesidad de modernizar los estatutos internos.
Desde la Casa Rosada insisten en que el bloque ha derivado en una estructura burocrática que actúa más como una barrera que como un puente hacia el comercio global. El objetivo de la delegación argentina es presionar para que cada país socio obtenga la libertad de negociar tratados de libre comercio de forma independiente, eliminando la obligación de consenso total para acuerdos externos.
El acuerdo con la Unión Europea, en un callejón sin salida
La cumbre, presidida por Luiz Inácio Lula da Silva, se produce en un clima de incertidumbre total respecto al histórico pacto con la Unión Europea. La firma, que parecía inminente, ha vuelto a dilatarse por las exigencias del viejo continente:
·El bloqueo francés: El Elíseo ha solicitado formalmente posponer la rúbrica, exigiendo salvaguardas ambientales y agrícolas extremadamente estrictas para proteger a sus productores locales.
·La postura italiana: La primera ministra Giorgia Meloni calificó de "prematuro" el avance del acuerdo. Aunque asegura no querer bloquearlo, Italia exige más tiempo para definir controles sanitarios y técnicos, proyectando un posible cierre recién para inicios de 2026.
La estrategia de la Cancillería
Mientras el gobierno de Brasil intenta forzar un cierre antes de que termine el año, Argentina observa el panorama con cautela. Durante la reunión preparatoria de cancilleres de este viernes, la representación nacional dejó claro que, si bien apoyan el pacto con Europa, la prioridad absoluta sigue siendo la desregulación del Mercosur.
Para el Ejecutivo argentino, la indefinición europea es una prueba más de que el bloque regional debe permitir a sus integrantes buscar socios alternativos con mayor velocidad y menor dependencia de las decisiones de Bruselas o París.
Puntos clave del viaje presidencial:
·Duración: Menos de 24 horas (ida y vuelta el sábado).
·Sede: Foz de Iguazú, Brasil.
·Misión: Impulsar la apertura comercial y cuestionar la burocracia del bloque.
