El gremio de estatales rechaza el proyecto del Gobierno, exige una urgente recomposición salarial y se opone al intento de reducir la planta estatal en un 10%. La protesta coincidirá con la posible presentación legislativa de las modificaciones.
La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) ha fijado el 9 de diciembre como la fecha para un Paro Nacional con una movilización masiva al Congreso de la Nación. El sindicato busca manifestar su rechazo total a la propuesta de reforma laboral impulsada por el Ejecutivo, además de demandar la reapertura inmediata de las negociaciones salariales y oponerse a cualquier plan de recorte de personal en el sector público.
Críticas a la reforma laboral
Rodolfo Aguiar, Secretario General de ATE Nacional, fue contundente al criticar la iniciativa gubernamental, a la que tildó de "pro mercado".
“Se trata de una reforma laboral pro mercado y la única finalidad que persigue el Gobierno es el disciplinamiento de la fuerza de trabajo. No es verdad que quieran mejorar la competitividad, la productividad o que crezca la economía. Eso no va a suceder quitando derechos”, afirmó Aguiar.
El dirigente fundamentó su postura recordando experiencias históricas: "Cuando fue la crisis económica global del 2009/10, legislaciones similares se implementaron en varios países del mundo y en todos los casos fracasaron." Además, señaló que los períodos de mayor crecimiento de empleo registrado en Argentina (entre 2002 y 2011/12) ocurrieron incluso bajo la vigencia de la doble indemnización, lo que, según ATE, prueba que la solución reside en "poner en valor las convenciones colectivas".
Rechazo al ajuste y reclamo salarial
En cuanto a la situación de los empleados estatales, Aguiar sostuvo que el sector no tolerará la pérdida de poder adquisitivo, la cual se ha agudizado durante el 2025.
"Quienes desempeñamos tareas en la Administración Pública nos negamos a ser expulsados por debajo de la línea de pobreza. Tienen que convocar a paritarias y otorgar una recomposición salarial de manera inmediata", exigió el Secretario General.
El gremio también se opone firmemente al plan del Gobierno de recortar un 10% de la dotación de trabajadores estatales. Aguiar advirtió que la idea es una "quimera" para el Ejecutivo, ya que, a pesar de la desinversión, los servicios públicos operan ya en su nivel histórico más bajo. Este intento de reducción afectaría principalmente a organismos descentralizados clave como el INDEC, el CONICET, la ANSES, la Oficina Anticorrupción, el INTA y el ENARGAS, entre otros.
La medida de fuerza fue definida por unanimidad en el Confederal del sindicato el 27 de noviembre, y su adelantamiento busca coincidir con el momento en que el proyecto de reforma laboral sea presentado en el Congreso. En CABA, se prevén retiros de los puestos de trabajo a partir de las 10:30, con modalidades de protesta específicas que serán definidas por cada seccional provincial.
