La jueza Loretta Preska, del Distrito Sur de Nueva York, ha dictaminado que Argentina debe transferir el 51% de las acciones de YPF a los fondos buitre beneficiarios del juicio por la expropiación de la compañía. Esta decisión se enmarca en la condena impaga de US$16.100 millones que pesa sobre el país.
La orden de Preska responde a una presentación de los demandantes para asegurar el cobro del millonario fallo. En línea con una exigencia anterior de principios de 2025 para que Argentina brinde información sobre sus activos (incluyendo oro y acciones de otras empresas estatales), la jueza ahora otorga un plazo de dos semanas para que se concrete la cesión de las acciones de la petrolera.
Específicamente, Preska dispuso que se le ordene a Argentina "transferir sus acciones Clase D de YPF a una cuenta de custodia global en BNYM en Nueva York dentro de los 14 días posteriores a la fecha de la orden". Además, instruyó a BNYM "para que inicie una transferencia de los intereses de propiedad de Argentina en sus acciones Clase D de YPF a los demandantes o sus designados dentro de un día hábil a partir de la fecha en que las acciones sean depositadas en la cuenta".
Este fallo representa un giro significativo en el litigio por la expropiación de YPF, con implicaciones directas sobre el control de la principal empresa energética argentina.