El acuerdo con el FMI incluiría también la exigencia de aumentar la cantidad de años de aportes para poder acceder a la jubilación.
La directora del Fondo Monetario Internacional (FMI) Kristalina Georgieva anticipó que el Gobierno de Javier Milei se comprometió a avanzar en una serie de reformas para conseguir la firma del último préstamo del organismo internacional. El FMI emitió un comunicado confirmando la aprobación por parte del Directorio de un nuevo acuerdo con la Argentina, el vigésimo tercero en la historia, por USD 20.000 millones. El programa contempla una flexibilización del cepo al dólar, un desembolso inicial de USD 12.000 millones y el compromiso de las autoridades locales de consolidar el equilibrio de las cuentas públicas.
En ese mensaje, la titular del FMI afirmó: “Partiendo del compromiso de las autoridades con un objetivo de déficit cero y de su trayectoria de lograr el primer superávit fiscal en casi dos décadas, el programa se centra en fortalecer la calidad y la sostenibilidad del ancla fiscal. Esto se sustentará en una disciplina continua del gasto, medidas de eficiencia y reformas bien secuenciadas de los sistemas tributario, de coparticipación de ingresos y de pensiones. Se seguirán realizando esfuerzos para proporcionar suficiente margen fiscal para la asistencia social prioritaria y el gasto prioritario en infraestructura”.
Entre otras cuestiones el Fondo exige reformar el sistema jubilatorio argentino, precisamente cuando jubilados y pensionados cargan sobre sus espaldas con el mayor esfuerzo del ajuste global ejecutado por Javier Milei. El organismo internacional pide aumentar la edad jubilatoria: pasaría de los actuales 60 a 65 años para las mujeres; y de los actuales 65 a 68/70 años para los varones.
También exige aumento de los años de aporte: de 30 a 35 años; así como implementar un subsistema de capitalización individual, al estilo de las noventosas AFJP y que conviva con el sistema de reparto.
El Fondo también reclama que se terminen definitivamente los planes de pago de deuda previsional, conocidos como “moratorias”. Esto es algo que no ha renovado la actual gestión, aunque la oposición se propone reflotar.
En ese marco, el esquema de de reformas estructurales del FMI reclama: Publicar un informe sobre empresas estatales y un plan para su privatización. Se trata de una profundización del plan de desguace del Estado que trazó la propia gestión libertaria pero en el que hasta ahora hubo pocos avances concretos.