El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, pidió hoy que el Senado rechace de la ley Bases, que ahora deberá ser tratada en esa cámara y por la cual se otorgan facultades especiales al Poder Ejecutivo para privatizar empresas públicas, eliminar la moratoria previsional, habilitar la creación de un régimen de incentivo para “grandes inversiones”, una reforma laboral y el paquete fiscal, que contempla un blanqueo de capitales y la reposición del impuesto a las Ganancias a los trabajadores y otros tributos.
“El Senado tiene que rechazar la Ley Bases de Javier Milei. Es una ley que institucionaliza la deserción del Estado Nacional de sus obligaciones más elementales, que consagra privilegios, deteriora derechos, resigna soberanía y profundiza la desigualdad”, posteó el mandatario bonaerense en sus redes sociales.
Es una ley que institucionaliza la deserción del Estado Nacional de sus obligaciones más elementales”.
El economista analizó que “la ley de Milei sienta las bases para desintegrar el Estado y que en Argentina impere la ley de la selva” y opinó que “lo que pretenden es legalizar los destrozos que ya están haciendo: caída récord de salarios y jubilaciones, recesión, despidos y desempleo, paralización de la obra pública, atropello a las provincias, tarifazos despiadados y entrega del patrimonio nacional”.
“No es buena idea darle superpoderes a un presidente tan alejado de la realidad, que no es capaz ni de gobernar sus propios impulsos que descarga sobre cualquiera que manifieste una crítica”, estimó Kicillof.
Luego, manifestó que desde determinados sectores se plantea la necesidad de “darle herramientas al presidente” y se preguntó: “¿Para qué usará esas herramientas un presidente que considera que el Estado es una organización criminal, que ataca a la Universidad pública y que llama héroes a quienes fugan dólares?”.
“No son las bases para refundar la Argentina, son las bases para fundirla. Entrega a los jubilados, a la clase media, a los trabajadores, a los pequeños productores, a las pymes, para beneficiar al puñado más rico y poderoso”, advirtió el mandatario.
En ese sentido, recalcó: “Para nosotros, las bases de una sociedad mejor, las bases de un futuro en común son otras: la solidaridad, la soberanía, la producción, la industria, la cultura, la ciencia, el desarrollo y los derechos”.
Los votos
Con 142 votos a favor, 106 en contra y 5 abstenciones, las iniciativas se aprobaron en general en el marco de una maratónica sesión que comenzó ayer al mediodía y se extendió por más de 20 horas, mientras en las inmediaciones del Congreso se realizaron protestas de movimientos sociales, agrupaciones polìticas y sindicales, en rechazo a los proyectos enviados por el Gobierno.
Los proyectos fueron apoyados por el oficialismo de La Libertad Avanza, con el respaldo del PRO y el radicalismo; y votaron en contra de las iniciativas Unión por la Patria, la izquierda y el socialismo.
En tanto, las cinco abstenciones respondieron a cuatro diputados de la UCR (Facundo Manes, Fernando Carbajal, Marcela Coli, Pablo Giuliano y una de la CC-ARI, Mónica Frade.