Foto Daniel Davobe

Javier Milei había señalado al artículo 14 bis de la Constitución Nacional como “parte del cáncer argentino” señalando que era “la idea de la justicia social materializada en un artículo”.

Ya en campaña se había manifestado a favor de derogar el artículo 14 bis de la Constitución Nacional. Es el que dice: “El trabajo en sus diversas formas gozará de la protección de las leyes, las que asegurarán al trabajador: condiciones dignas y equitativas de labor; jornada limitada; descanso y vacaciones pagados; retribución justa; salario mínimo vital móvil; igual remuneración por igual tarea; participación en las ganancias de las empresas, con control de la producción y colaboración en la dirección; protección contra el despido arbitrario; estabilidad del empleado público; organización sindical libre y democrática, reconocida por la simple inscripción en un registro especial”.

También establece: “El Estado otorgará los beneficios de la seguridad social, que tendrá carácter de integral e irrenunciable. En especial, la ley establecerá: el seguro social obligatorio, que estará a cargo de entidades nacionales o provinciales con autonomía financiera y económica, administradas por los interesados con participación del Estado, sin que pueda existir superposición de aportes; jubilaciones y pensiones móviles; la protección integral de la familia; la defensa del bien de familia; la compensación económica familiar y el acceso a una vivienda digna”.

Como ha sucedido durante el gobierno de Carlos Menem, el de Mauricio Macri y lo que adelanta Javier Milei, el objetivo es ir por la reforma laboral como paso previo a desmantelar el 14bis.
La receta es similar: reducción de los aportes patronales, la libre contratación, fuera del amparo de los montos establecidos en los convenios y la eliminación de las indemnizaciones por despido sin causa.

Como el tema de la indeminización tiene mucho respaldo legal y social, avanzaría con una modificación para crear un "seguro de desempleo", al estilo de la UOCRA.

Siempre en tren de avanzar con reformas, propondría un plan "libre contratación", que permitirá a las empresas negociar en forma directa con el trabajador el monto del salario, sin regulación, sin convenios colectivos de trabajo de por medio. Es decir, sin gremios. Milei suele decir que "la regulación laboral argentina es arcaica, y solo sirve para entorpecer la generación de puestos de trabajo".