El gobernador de Neuqun Omar Gutirrez y el exmandatario Jorge Sapag

El sector Azul y Blanco del partido provincial neuquino, que encabezan Marcelo Rucci y Guillermo Pereyra, emitieron un documento donde señalan que "La actualidad del MPN pide a gritos un golpe de timón".


El escrito hace un oscuro diagnóstico de la realidad del MPN "Los resultados electorales que obtuvo el Movimiento Popular Neuquino en las últimas elecciones provinciales y nacionales son un síntoma de una profunda enfermedad. Estos resultados son el corolario evidente de un sistema de conducción agotado y sin respuestas", objeta en clara referencia al sector azul del jorgesapagismo y el gobernador Omar Gutiérrez que conducen la convención y el partido.

En la misma línea, agrega: "Llegamos a esta instancia perdidosa tras años de mala gestión política, en la que un grupo de dirigentes parecen haberse apropiaron del MPN con fines personalistas hasta dejarlo herido de muerte. Estas autoridades cerraron las puertas a nuevos dirigentes y nuevos espacios de debate; practicaron “dedismo” y arreglos oscuros que solo buscaron privilegiar su posición sin importar el afiliado y la comunidad en general, que vio -gracias a malas gestiones administrativas de gobierno- resentido su sistema de salud, de educación y desarrollo económico de la provincia".

"Esta actitud nos encuentra sin representación legislativa nacional, un puñado de diputados y el menor número histórico de intendencias en el territorio provincial. Sin mencionar que en estas últimas elecciones nacionales nos dejó peleando el último lugar con la izquierda y los votos nulos", compara.

Luego razona: "Debemos renovar nuestra dirigencia si no queremos desaparecer. Los que hoy conducen al MPN deben dar un paso al costado y convocar a una renovación total de la Junta de Gobierno y de la Convención. Todos los colores partidarios y todas las ideas de los afiliados tienen valor y hay que darles el lugar que corresponde. Solo el debate de ideas enriquece y moviliza. Hay que salir del medioevo político en el que nos han colocado".

"La voluntad popular se debe expresar siempre a través de un partido político sólido y dinámico. Por eso ante este escenario de desintegración debemos fortalecer la herramienta que nos permitió que Neuquén sea la provincia argentina con mejor calidad de vida, una tierra de oportunidades para las familias, de crecimiento y desarrollo. Desde la agrupación Azul y Blanca hemos advertido muchas veces de esta situación y nos propusimos como canal de mediación y apertura del partido con el único fin de evitar la catástrofe en la que se encuentra el partido. Pero tampoco fuimos escuchados", recuerda.

"Está demostrado que la ciudadanía eligió superar las divisiones y los sectarismos, el MPN no puede quedar atrapado en pocas manos que dividen y expulsan. Quienes nos trajeron hasta este punto deben dar un paso al costado y se deben convocar de manera urgente a elecciones de renovación. Debemos recuperar la voz de todos y esa historia que nos hizo grandes. El Movimiento Popular neuquino es de la gente", reclama finalmente.