El intendente saliente, Gustavo Suárez, hizo uso de la palabra aunque encontró cerrada resistencia de muchos de los presentes que por momentos hicieron inaudible su alocución. En algunos momentos sonó el "que se vaya".
Suárez habló 9 minutos aunque fue dificultoso comprenderlo. Por momentos, los abucheos lo tapaban y él se mantenía en la decisión de continuar hablando a pesar de todo.
El jefe comunal que se despedía, saludó a quienes participaron del acto incluyendo a su esposa. Luego siguió: "Quiero recordar a aquellos compañeros que empezaron conmigo en la gestión , sobre todo a la gente que me acompañó desde un principio", dijo y nombró a Angel Rodríguez, Marisa Iriberri, Néstor Imbert, Daniel Waraka Anticura, entre otros como José Héctor Rioseco. Allí recogió algunos aplausos.
Suárez señaló que "voy a estar a disposición de Claudio y de Plaza... Hay que estar preparados, en lo que es a nivel nacional, provincial hay que enfrentar nuevos desafíos políticos, sobre todo en lo económico, que nos atraviesa a todos como familia, estado, y sobre todas las cosas hay que encontrar amigos en la política, hay que encontrar aliados en la política, porque es la única forma de salir adelante. Yo lo hice, los encontré por eso los recuerdo y por eso los voy a extrañar", dijo.
"Los errores que he cometido, lo asumimos, me he equivocado… no todos tenemos un libro para hacer política, la política se aprende día a día", sostuvo.
También hubo un párrafo para la "militancia del MPN, con el respeto que me merece mi querido partido, que me dio la oportunidad de ser intendente de mi querida ciudad", reconoció.