Los testimonios que se están brindando en el marco del juicio por el intento de homicidio de un florista muestran la frialdad de la pareja que lo atacó con la clara intención de asesinarlo.

El 28 de agosto, el juez de Control de Garantías Nº 3, Lucas Vaccaroni, resolvió no hacer lugar al pedido de inimputabilidad presentado por la defensa de Juan Ignacio Reyes Modotti, acusado por el intento de homicidio contra el florista Maximiliano Gutiérrez, ocurrido el 12 de diciembre de 2024 en Valle Viejo.

La decisión también negó la solicitud de recupero de libertad planteada por el imputado, que seguirá detenido mientras avanza la investigación.

El relato de la víctima

En la denuncia presentada días después del ataque, Gutiérrez relató cómo fue agredido en la vivienda de Reyes Modotti y señaló además la participación indirecta de Hebe Mabel Modotti (madre del acusado), la novia del imputado y una amiga de la familia.

Según declaró, durante la agresión escuchó a la madre de Reyes Modotti reclamar desde afuera: “Abrí, Juan, ¿qué pasa?”. Posteriormente, la mujer habría ingresado a la vivienda y, lejos de asistirlo, le recriminó al florista: “¿Qué le hiciste? Metete a bañar”.

Gutiérrez sostuvo que, tras insistir en que le devolvieran las llaves de su vehículo para poder retirarse, escuchó conversaciones entre la madre, su amiga y la novia del acusado, en las que discutían “qué iban a hacer, si lo dejaban ir, si limpiaban la sangre o qué hacían con el martillo”. Finalmente, Mabel le entregó las llaves y pudo huir de la vivienda.

La pericia psicológica

En la última audiencia, una perito psicóloga de parte de la querella cuestionó el informe que atribuía a Reyes Modotti una edad madurativa de ocho años. La especialista señaló que “su edad madurativa no se aleja mucho de su edad cronológica” y que el imputado cuenta con un historial educativo y social que no respalda la hipótesis de un desarrollo mental infantil.

“Me paré frente a una persona que ha tenido un desenvolvimiento educativo, que terminó los niveles escolares, alcanzó un nivel superior, pudo mantener un vínculo de pareja y cierta vinculación social. Todo esto no coincide con una edad madurativa de ocho años”, explicó la psicóloga.

Próximos pasos

Con la resolución del juez Vaccaroni, la causa continuará su curso bajo la calificación de intento de homicidio. La investigación deberá determinar el rol que tuvieron los allegados al acusado durante y después del ataque, y si esas conductas constituyen encubrimiento u otros delitos vinculados.