Con la acusación a cargo de la fiscal del caso María Eugenia Titanti, un varón comenzó a ser juzgado hoy, imputado por haber abusado sexualmente de una joven con la que había pactado un encuentro a través de una red social.
Se trata de A.H.L, quien cumple prisión preventiva desde el día en que se le formularon cargos, el 10 de junio, y a quien durante una audiencia realizada ayer, se le extendió esa medida cautelar por otros 4 meses. Fue por solicitud de la fiscal Titanti, quien explicó que, sobre el inicio del juicio, era indispensable mantener la prisión preventiva para contrarrestar los riesgos procesales de fuga y de entorpecimiento de la investigación, además de proteger la integridad de la víctima.
El hecho ocurrió el 8 de junio, entre las 8 y las 17, plazo durante el que el imputado ejerció violencia sobre la víctima y la abusó sexualmente en dos oportunidades, en una vivienda del barrio Cordón Colón de la ciudad de Neuquén.
Durante el juicio, la fiscal Titanti y el asistente letrado Bruno Miciullo presentarán las pruebas y testimonios que sostienen la teoría del caso de la fiscalía: que A.H.L cometió los delitos que se le atribuyen luego de contactar a la víctima a través de la red social Facebook y de pactar un encuentro en una plaza. Fue en ese marco que acordaron ir a la casa del A.H.L, donde compartieron bebidas y droga. La fiscal marcó en ese momento un punto de inflexión, cuando la joven le pidió que la llevara a su casa porque se quería ir. El imputado se negó, trabó la puerta y le dijo que si quería salir tenían que tener relaciones sexuales. Titanti destacó que la joven accedió, “sin haber podido consentir libremente esa acción”, pero que reiteró el pedido. Cómo respuesta, “el imputado se ofuscó y comenzó a golpearla”. “Se valió incluso de un taco de pool que había en la casa y que se rompió durante la agresión”, añadió durante el alegato de apertura en la audiencia de hoy, y precisó que el imputado continuó con el ataque. Para lograr irse del lugar, la mujer simuló estar de acuerdo con lo que había pasado y así, cerca de las 17, A.H.L accedió a llevarla a su casa. En el trayecto, la víctima pudo registrar con su teléfono una amenaza por parte del imputado y advirtió a familiares lo que le había ocurrido.
El imputado sólo pudo ser identificado a partir de un hecho fortuito: víctima y acusado se encontraron en el hospital, a dónde este último acudió para curarse una herida que le habían hecho los familiares de la mujer, cuando la llevó a su vivienda. Fue en esa circunstancia se pudo conectar la identidad del acusado con el relato de la víctima.
El juicio es por los delitos de abuso sexual con acceso carnal (dos hechos), en concurso real con rapto (artículos 119, tercer párrafo; 130; 55 y 45 del código penal)
El tribunal está integrado por los jueces Cristian Piana y Andrés Repetto, junto a la jueza Carina Álvarez.