La firma Georgalos, dueña de marcas icónicas como Mantecol y Palitos de la Selva, ha puesto en marcha un esquema de suspensiones laborales rotativas que afecta a cerca de 600 operarios en sus plantas de Beccar (Buenos Aires) y Córdoba. La medida, que rige desde el 1 de diciembre, es justificada por la compañía debido a una significativa caída en las ventas, exacerbada por la estacionalidad de la demanda y el impacto de la competencia de productos importados.
El plan inicial está programado para cubrir la primera quincena de diciembre y ya afectó temporalmente a unos 180 trabajadores solo en el establecimiento de Beccar.
Conflicto sindical por homologación y salarios
La decisión ha generado fuerte rechazo de la representación interna de los trabajadores. Delegados gremiales denunciaron que la suspensión está operativa a pesar de que el Ministerio de Trabajo aún no ha homologado el acuerdo que la habilita.
El mayor punto de conflicto es la reducción de ingresos: el esquema contempla el pago del 80% del salario bajo un formato no remunerativo. Esto implica una merma real del 20% en el bolsillo de los empleados, además de la interrupción de los aportes jubilatorios durante el período de la suspensión. La Comisión Interna aseguró que rechazó el acuerdo en asamblea, aunque fue avalado por las autoridades del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA).
La presión de la importación brasileña
Desde el ámbito sindical, se identifica un factor clave que presiona sobre la producción nacional: el ingreso masivo de golosinas provenientes de Brasil. Los representantes gremiales señalaron que la mayor presencia de estos productos extranjeros ha desplazado la elaboración local y agudizado la baja en el consumo.
Paradójicamente, la decisión de reducir la producción ocurre apenas un mes después de que Georgalos anunciara una ambiciosa inversión de 1,5 millones de dólares para lanzar una nueva línea de productos en la categoría de helados.
Mientras tanto, la empresa aseguró que no habrá despidos durante el período de suspensiones y que la continuidad de este esquema será reevaluada una vez finalizada la etapa inicial. Paralelamente a la crisis productiva, Georgalos reactivó su búsqueda de $100 millones en fondos, interrumpiendo el plan de expansión que había pausado antes de las últimas elecciones nacionales por la incertidumbre económica.
