El jueves 4 de diciembre será una noche memorable para los aficionados a la astronomía en todo el país. Los cielos de Argentina se preparan para recibir un evento celestial de gran magnitud: la Luna llena alcanzará su máxima aproximación a la Tierra, ofreciendo una Superluna con características excepcionales que no se repetirán en casi dos décadas.
Este fenómeno, conocido popularmente como "Luna Fría" en otras latitudes, es catalogado por los expertos como la superluna más importante del periodo 2024-2025. Su rareza radica en la alineación perfecta de tres factores poco comunes:
1.Una cercanía extrema a la Tierra (perigeo).
2.Un brillo amplificado fuera de lo normal.
3.Su coincidencia con el ciclo orbital de 18.6 años denominado standstill.
Cuándo mirar al cielo
El momento de plenitud del satélite ocurrirá oficialmente a las 20:14 horas de Argentina (23:14 GMT).
Para los observadores en nuestro país, el espectáculo será particularmente llamativo. La Luna se asomará por el horizonte oriental a baja altura, por lo que la refracción atmosférica le otorgará tonos dorados o rojizos. Además, la cercanía con el horizonte magnificará su tamaño visual, creando la impresionante "ilusión lunar".
Una aproximación que rompe récords
Esta Luna se acercará a tan solo 357.219 kilómetros de la Tierra. Esta distancia hará que su tamaño aparente sea un 8% mayor y su brillo aumente aproximadamente un 16% en comparación con una Luna llena promedio.
Si bien la diferencia no es drástica a simple vista, estas condiciones de claridad y cercanía ofrecen una oportunidad de oro para los astrofotógrafos, quienes podrán lograr tomas nítidas y detalladas, especialmente bajo los cielos fríos y despejados de diciembre.
¿Por qué es tan especial?
Los expertos señalan que esta superluna no tendrá una configuración comparable hasta el año 2042.
La singularidad de este evento se explica por la compleja dinámica orbital. La órbita lunar no solo es elíptica, sino que también experimenta inclinaciones a largo plazo. Cada 18.6 años ocurre un standstill (actualmente en curso), que maximiza la altura y declinación de la Luna en el cielo.
La Luna llena de este jueves se ubica en el punto más extremo de ese standstill, sumado a su posición de perigeo (máxima cercanía), creando una combinación que no se repetirá hasta que el ciclo orbital se complete nuevamente en casi dos décadas.
Para disfrutar al máximo, se recomienda la observación durante el amanecer o atardecer, ya que es cuando el disco lunar toca el horizonte y se percibe con mayor tamaño. El fenómeno seguirá siendo espectacular incluso el viernes 5 de diciembre, el día posterior a su plenitud.
