Desde Salud se promueve la prevención de este cáncer con la aplicación de la vacuna, controles periódicos y hábitos saludables.

Hoy, en el Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Cuello Uterino (CCU), el ministerio de Salud recuerda que la prevención y los hábitos de cuidado son fundamentales para disminuir riesgos y complicaciones de salud. En este mes, la cartera sanitaria provincial concretó diferentes acciones en torno a la prevención y promoción de la detección de este tipo de cáncer. Se trata de una enfermedad prevenible, siendo la vacunación y los estudios diagnósticos y de detección periódicos parte de las políticas sanitarias implementadas en la Provincia.

“Este mes llevamos adelante una estrategia provincial para entregar test para autotoma de muestra de VPH, donde el equipo de salud estuvo asesorando a las personas y recibiendo los tubos para su procesamiento en pos de prevenir el cáncer de cuello de útero y favorecer la accesibilidad a la salud. Las acciones de prevención y promoción de la salud en el territorio son parte de las políticas públicas de nuestro Ministerio para disminuir y controlar enfermedades y empoderar a la comunidad”, sostuvo la ministra de Salud, Andrea Peve.

Desde el Programa de Prevención de Cáncer de Cuello de Útero, perteneciente al Programa de Prevención de Tumores de la Dirección Provincial de Atención Primaria de la Salud, indicaron que en relación a los estudios de detección y diagnóstico que se realizan en la Provincia, durante 2022 se procesaron 9.737 test de VPH y 8.117 muestras de PAPs en el Laboratorio de Anatomía Patológica del Hospital Provincial Neuquén Dr. Eduardo Castro Rendón.

Además, se destaca que este año, el mes de marzo se planteó como un mes de visibilidad y protagonismo para las mujeres y desde el Ministerio de Salud se implementó una estrategia provincial de entrega de test para autotoma de muestra de VPH para la que se destinaron más de 1.800 tubos colectores para que las personas con útero de 30 a 64 años puedan retirar el kits de autotoma en actividades puntuales y en hospitales y centros de salud.

Sobre los estudios

El test de VPH fue incorporado como estrategia de detección en la Provincia en 2014. Este sencillo método se realiza a personas con útero entre los 30 y los 64 años (en conjunto con la toma del PAP) y en caso de resultar negativo, se repite cada 5 años. Si el resultado es positivo, no significa que la persona tiene cáncer de cuello de útero, sino que hay presencia del virus. En estos casos se realiza la lectura del PAP para evaluar la existencia de lesiones y en función de cada situación se definen los pasos a seguir.

El test de VPH se destaca por su efectividad para confirmar la presencia de los VPH de alto riesgo en el cuello uterino, incluso antes que se produzcan lesiones, algo primordial para tomar medidas preventivas.

Este método puede realizarse mediante dos modalidades: con toma dirigida en el consultorio y con autotoma en el domicilio u otro espacio privado y confortable. La segunda modalidad es una alternativa que permite ampliar la aceptabilidad del método y la cobertura.

En todos los casos, la entrega va acompañada de instrucciones claras sobre los pasos a seguir, el asesoramiento correspondiente y la coordinación para la entrega de la muestra a un efector de salud.

Las muestras se analizan en el Laboratorio de Anatomía Patológica del Hospital Provincial Neuquén Dr. Eduardo Castro Rendón, por lo que las personas pueden entregar las muestras en distintos efectores de la Provincia, desde donde serán enviadas para su análisis.

Es importante tener presente que para las personas con útero entre 25 y 29 años se indica solamente el Papanicolaou (PAP). Un estudio sencillo que detecta lesiones en el cuello del útero. Si durante dos años seguidos el PAP da negativo, se debe repetir el estudio a los tres años.

Vacuna para la prevención

La vacuna contra el VPH previene la infección de los VPH que causan cáncer de cuello de útero, de vagina, de vulva y el de orofaringe (base de la lengua, paladar blando, amígdalas y paredes laterales y posteriores de la garganta), es decir, los tumores de todos los órganos que pueden ser afectados por los VPH.

Está incorporada en el Calendario Regular de Vacunación, es gratuita y obligatoria para los niños y las niñas de 11 años. Se aplican dos dosis, con un intervalo mínimo de seis meses.

Además, una estrategia adicional recomienda la vacunación contra VPH para mujeres y varones entre 11 y 26 años que vivan con VIH y personas trasplantadas. En estos casos, el esquema es de tres dosis (0, 2 y 6 meses).

Sobre el cáncer de cuello de útero

El cáncer de cuello de útero o cervicouterino se produce por un crecimiento anormal de las células del cuello de útero causado por algunos tipos de VPH. El VPH es un virus muy común que afecta tanto a varones como a mujeres y se transmite por contacto sexual. Se estima que 8 de cada 10 personas lo tendrán en algún momento de sus vidas.

En la mayoría de los casos, el virus desaparece sin causar síntomas. Sólo en una pequeña proporción (alrededor del 5% de los casos), este virus provoca lesiones (malformaciones en las células) que con el tiempo pueden convertirse en cáncer.

Cada año, en Argentina se diagnostican 4.500 nuevos casos y 2.000 mujeres mueren a causa de esta enfermedad, lo que lo ubica como el tercer tumor más común detectado entre las personas con útero del país.

Sin embargo se estima que desde que se produce una lesión hasta que se desarrolla un cáncer en el cuello del útero, pasan entre 10 a 20 años. Por este motivo el cáncer de cuello de útero es una enfermedad altamente prevenible. Por la vacuna y por los estudios que detectan el virus o las lesiones a tiempo.