Unos 1.000 civiles están refugiados en la vasta red de túneles que corre bajo el complejo, junto a unos 2.000 combatientes ucranianos. En Kiev, Nancy Pelosi trasmitió el apoyo estadounidense a Volodimir Zelenski.
Una largamente esperada operación para evacuar a civiles de la bombardeada ciudad ucraniana de Mariupol estaba en curso este domingo, dijo la ONU, mientras que la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, se reunió con el presidente ucraniano en Kiev y reafirmó el apoyo de su país a Ucrania ante la invasión rusa.
El esfuerzo de evacuación se centra en una extensa planta siderúrgica donde se refugian civiles y los últimos combatientes ucranianos presentes en la sureña Mariupol, y el presidente Zelenski cifró hoy en 100 los primeros civiles ya sacados del lugar, poco después de que voceros de la ONU dijeran que estaba en curso el operativo.
Los comentarios de la ONU fueron la primera confirmación oficial no proveniente de alguna de las partes en conflicto de que estaba en curso una operación de evacuación de civiles de una planta siderúrgica de Mariupol donde permanecen refugiados junto a combatientes, luego de que Ucrania y Rusia informaran de la salida de algunos civiles.
El vocero de la ONU para las cuestiones humanitarias Saviano Abreu dijo en un comunicado que el esfuerzo por sacar a los civiles de la planta de la compañía Azovstal se estaba realizando en colaboración con el Comité Internacional de la Cruz Roja y en coordinación con autoridades de Ucrania y Rusia.
Zelenski dijo que este lunes se reunirá con los primeros civiles evacuados en Zaporiyia, una ciudad 227 kilómetros al noroeste de Mariupol.
"Comenzó la evacuación de civiles de Azovstal. El primer grupo de unas 100 personas ya está en camino a un área controlada. Mañana nos reuniremos con ellos en Zaporiyia", dijo el mandatario en su cuenta de Twitter.
A Zaporiyia ya habían ido muchos otros civiles que habían logrado escapar de Mariupol por sí mismos luego de que la ONU y la Cruz Roja tuvieran que abortar intentos previos de sacar a personas de la ciudad ante persistentes bombardeos o por dudas sobre la seguridad de las rutas de evacuación, llamadas corredores humanitarios.
Laerke contó que la evacuación es realizada con una caravana de vehículos que el 29 de abril inició un camino de 230 kilómetros hacia Mariupol y llegó al complejo siderúrgico ayer a la mañana, pero agregó que la situación era muy compleja y que no podía dar más detalles por razones de seguridad, informó la agencia de noticias AFP.
Se cree que unos 1.000 civiles están refugiados en la vasta red de túneles que corre bajo el complejo, junto a unos 2.000 combatientes ucranianos.
El Ejército de Rusia tomó control de la ciudad del sur de Ucrania desde hace 10 días, luego de haberla bombardeado y sitiado un mes y medio, y la planta de producción de acero es el único lugar de Mariupol donde aún resisten militares ucranianos.
Los combatientes ucranianos atrincherados dijeron el sábado que unas 20 mujeres y niños habían sido evacuados del lugar durante un alto el fuego.
El Ministerio de Defensa de Rusia elevó a 46 la cifra de civiles evacuados de la planta y de sus alrededores, en dos tandas.
La agencia de noticias Europa Press dijo que otros 40 civiles, entre ellos 14 mujeres y ocho niños, fueron evacuados de la planta de Azovtsal, pero la información no fue confirmada por ninguna autoridad.
Los evacuados fueron llevados a la localidad de Bezimenne, a unos 30 kilómetros al este de Mariupol, en tres colectivos marcados con insignias de la ONU, agregó la agencia de noticias.
Ofensiva en curso
La captura de Mariupol era considerada crucial para el éxito de Rusia en una ofensiva en curso en la región del este de Ucrania donde se ubica, conocida como Donbass.
Rusia lanzó la ofensiva el mes pasado con el objetivo de conquistar todo el Donbass, luego de retirar las tropas que tenía desplegadas en la norteña región de Kiev, la capital ucraniana.
Gran parte de la región está controlada desde 2014 por milicias separatistas rusoparlantes que son aliadas de las fuerzas rusas.
Se estima que miles de personas han muerto en Ucrania desde el inicio de la invasión rusa, el 24 de febrero. La ONU dijo haber confirmado casi 2.900 civiles muertos, y que más de 5,3 millones de ucranianos abandonaron el país por la guerra.
Estados Unidos y la Unión Europea (UE) han apoyado decididamente a Ucrania, a quien han enviado ayuda militar y económica para hacer frente a Rusia.
Apoyo estadounidense a Ucrania
Pelosi, una veterana congresista demócrata, es segunda en la línea de sucesión presidencial de Estados Unidos después del vicepresidente, y la funcionaria de más alto rango de su país en visitar la capital de Ucrania y reunirse con el presidente Volodimir Zelenski desde que el país fue invadido por Rusia.
La visita de a Kiev permitió comprender mejor lo que "se debe hacer" para ayudar a Ucrania, aseguró este domingo Pelosi en una conferencia de prensa en Rzeszow, en el sureste de la vecina Polonia, a donde viajó después junto con una delegación del Congreso estadounidense que encabeza.
Pelosi contó que ella y otros miembros de la delegación se reunieron con Zelenski tres horas en Kiev y le trasladaron un "mensaje de aprecio del pueblo estadounidense a su liderazgo".
La congresista de California dijo que estaba "asombrada" de la experiencia de Zelenski en todas las cuestiones y describió al mandatario y al encuentro sostenido como "una notable clase magistral de liderazgo", informó la cadena CNN.
Más temprano, en un comunicado, la delegación estadounidense dijo que realizó la visita a Kiev "para enviar un mensaje inequívoco y rotundo al mundo: Estados Unidos está con Ucrania".
Zelenski subió un video del encuentro a su cuenta de Twitter y agradeció el apoyo de Estados Unidos, que ha dado a Ucrania cientos de millones de dólares y toneladas de armas para hacer frente a la invasión militar rusa.
"Gracias a Estados Unidos por ayudar a proteger la soberanía y la integridad territorial de nuestro Estado", dijo Zelenski en un mensaje de Twitter acompañado por el video, en el que se lo ve recibir a Pelosi y a otros congresistas estadounidenses en la sede del Gobierno en Kiev, flanqueado por guardias armados.
Esta nueva visita ocurre una semana después de que viajaran a Kiev el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, y el secretario de Defensa, Lloyd Austin.
Durante su visita, ambos funcionarios anunciaron el retorno progresivo de la presencia diplomática estadounidense en Ucrania y una ayuda adicional, directa e indirecta, de más de 700 millones de dólares del Gobierno del presidente Joe Biden.