Soledad Arratia es una mamá que tiene una historia difícil. Su hijo de 25 años es poliadicto y ahora (a las 15,35) está tirado en el patio de la casa del abuelo. Ella teme que pueda morir congelado o de una sobredosis. Asegura que el chico fue diagnosticado con esquizofrenia y pide a la justicia que lo interne para ser tratado también por las adicciones. La mamá no puede parar de llorar y en su voz se nota la angustia del momento que padece.

Las historias con el hijo de 25 años son conocidas en la ciudad. A veces corre con la bata del hospital por las calles. "Nos ha robado para vender las cosas, para comprar drogas; me pega", dice la madre.

Pero no es el único problema que debe afrontar. Soledad tiene otro hijo, de 14 años, que es epiléptico. La presencia de su hermano lo altera "porque ha visto que me pagaba" -contó- y sufre un ataque tras otro.

Soledad afronta todo eso con su sueldo de empleada doméstica y una cuota alimentaria que aporta el padre de los chicos. Pero no puede afrontar una internación de su hijo mayor y ahora pide a la justicia que lo internen para que se trate de sus adicciones.

"Estoy viviendo una situación muy, pero muy difícil. Es poliadicto y se le diagnosticó esquizofrenia pro tanto consumo de drogas. Es un chico que habla solo... él anda en la calle y pide. Acá en casa robó el celular a su hermano y cosas de acá para venderlas", relató.

"Para la justicia Juan José puede tomar sus decisiones... pero es una bomba de tiempo y yo pido a la justicia que por favor lo obligue a Juan José a internarse. Lo obligue a su papá que es un señor pudiente con el cual estuvimos casados casi 20 años y nacieron 5 hijos. El no se separó de mí, se separó de sus hijos también", sostuvo.

"Su papá es pudiente y, ya que la justicia no lo obliga a que se interne, que el papá le pague él la internación", pidió.

"Siempre lo tuve a mi hijo conmigo, se escapaba, me robaba, me pegaba y volvía. Yo le volvía a abrir la puerta, darle ropa, darle alimento. Le pagaba el siquiatra particular. Siempre me moví con mi hijo. Pero mi hijo de 14 años empezó con convulsiones", relató.

"El padre me dio la obra social después de un juicio. Pero es tan mala que le cubre el 40% nada más", contó.

El hijo menor "no quiere saber nada con su hermano porque lo ha visto cuando me golpeaba. Hoy la neuróloga me decía que necesita tranquilidad. A veces está sentado, me doy vuelta y está todo arrollado, tiene que venir la ambulancia, llevarlo y está horas y horas allá", describió.

Mi papá tiene una enfermedad oncológica. Ahora voy a verlo y mi papá está descompuesto porque Juan José lo altera, Juan José nos enfermó a todos. Y yo digo hoy ¿qué hago? lo dejo que amanezca congelado, con una sobredosis porque consume cualquier cosa, lo dejo que mate a alguien en la calle para robarle o ¿qué hago?", se pregunta.

"Mi papá está enfermo, es oncológico, no puede pasar malos momentos.. que alguien me ayude. Que la justicia lo obligue a estar internado porque no puede andar en la calle un chico", planteó y recordó que vio en la TV una noticia de un joven que escapó de una institución, le quitó un arma a un policía y tiroteó a gente en la calle. "Yo no quiero que me pase lo mismo", dijo desconsolada.