La lluvia llevó un poco de alivio a los correntinos que enfrentaban incendios en unas 800 mil hectáreas, es decir el 9% del territorio provincial. Los bomberos la recibieron con festejos.

Hoy la lluvia iguala un poco el combate contra las llamas y permite hacer más efectivo el trabajo de brigadistas y bomberos.

El gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, dijo este jueves que “la cantidad de incendios se redujo en la provincia un 30%”, aunque aún “quedan muchos focos por combatir”, y afirmó el combate contra las llamas está “avanzando gracias al trabajo de 3.000 personas movilizadas" en toda la provincia.