El Sindicato de Trabajadores Petroleros de Neuquén, Río Negro y La Pampa denunció este miércoles en el ministerio de Trabajo de la Nación un paro de 48 horas para la semana próxima. El reclamo es por 1.200 despidos que ya se produjeron y 2 mil trabajadores que están inactivos en sus casas.
Según indicaron desde el gremio "el paro con afectación de producción será jueves y viernes próxima semana. Arranca el miércoles a las 20 por el tema de cambio de turnos", detallaron.
Marcelo Rucci y Ernesto Inal, secretario general y adjunto del gremio petrolero, habían anunciado ayer la posibilidad de iniciar medidas de fuerza la semana próxima a raíz de los despidos que se están produciendo en el sector.
En medio de la celebración por el resultado electoral de este martes, Inal aseguró que "un mensaje que quiero dejar a esos señores empresarios que esta última semana decidieron despedir compañeros, quiero decirles a esos compañeros que se queden tranquilos porque mañana a partir de las 7 de la mañana nos ponemos a trabajar para que esos compañeros sean reincorporados", afirmó.
Rucci, a su turno, manifestó que “no nos casamos con nadie. Vamos a ir por la reincorporación de ese compañero despedido, sino la semana que viene vamos a hacer un paro general con afectación de la producción”, adelantó.
“Fuimos responsables y buscamos el diálogo, pero no hubo respuesta. Si hay que quebrar lanzas para que nuestros compañeros vuelvan a sus puestos, lo vamos a hacer”, aseguró. Y dejó una definición clara: “Vaca Muerta solo será posible con los trabajadores adentro. Sin ellos, no hay futuro”, remarcó. “Le están tocando la dignidad y el orgullo, a hombres y mujeres que detrás de ellos hay una familia, por la voracidad que tienen. Acá no están perdiendo plata acá están ganando menos, porque no están perdiendo, no es la situación de otras épocas y no les importa nada. Son unos piratas”, aseguró. En otro tramo, sostuvo que “Esto no fue un trámite: fue una demostración clara de conciencia colectiva, compromiso y lealtad a un modelo sindical que no se arrodilla”, y agregó: “Estamos muy preocupados. Si esto no cambia, vamos a ir a un paro total”, advirtió.
“Hay compañeros que están licenciados y otros directamente despedidos. Se apostó a las obras de transporte, pero faltó un puente entre el presente y lo que se viene. Ese vacío lo están pagando los trabajadores”.