Este sábado, desde las 19, se va a presentar en el Aula Magna de la UNCo, el documental "Camino de regreso", la historia de Dora Seguel, sobreviviente del denominado "Operativo Cutral Co", ocurrido en 1.976, en la ciudad petrolera. Luego habrá charla debate.
Dora, vecina de Cutral Co, dialogó con este medio sobre aquel pedazo de su historia.
P_: ¿Qué es el camino de regreso?
DS_: El camino de regreso es cómo reconstruirte después de una detención como la que sufrí.
P_: De un huracán enorme que te arrastra la vidaa y te lleva todo.
DS_: Era desolador todo lo que vivías, porque no era solo el hecho que dos pibas chicas, de 16, 19 años, tiradas en una ruta sin documentos, ojos vendados, manos atadas. Las dejaron ahí a la buena de Dios y arreglátelas como puedas. Pasaba a ser tu decisión lo que hacías con tu vida y tener que después de todo lo que viviste en esa semana de detención, tener la lucidez de ver cómo encarás el regreso.
P_: Primero el regreso y después el resto de tu vida, lógicamente. ¿y cómo fue esa reconstrucción?
DS_: Y esa reconstrucción es dura, es muy dura porque no tenés herramientas, las tenés que fabricar vos, las inventás vos sobre el momento, sobre la marcha vas inventando, cómo ir solucionando, cómo contener a tus padres.
P_: ¿Qué fecha estamos hablando?
DS_: Del 76. Nosotros tuvimos una detención menor, de una semana, en el centro clandestino de Bahía Blanca. Y nos dejan ahí liberadas en esa ruta.
P_: ¿En la ruta 22?
DS_: No, en Bahía Blanca. En la ruta que va de Bahía Blanca a Coronel Dorrego. Fijate vos tan chicas y analizando todo, pensamos si hacemos dedo nos iban a llevar pero ponés en riesgo al que te levante, porque lo pescaba con dos pibas que habían estado detenidas y demás sin documento lo ponés en riesgo esa persona sí, sí, sí y es ahí donde decidimos ir hasta la estación de servicio y pedir que llamen a la policía. Era la única manera de no dañar a nadie. P_: ¿Allí se inicia el camino de retorno, el camino de regreso a Cutral Co?
DS_: Y el camino de regreso, las chicas lo toman desde qué herramientas íbamos tomando como familia para sobreponernos. Y hubo cosas que no se las dijimos a nuestros padres, por ejemplo, las violaciones, no se las dijimos. Estaban destruidos y preocupados porque no podían dar con el paradero de Arlen, que continúa desaparecida. No le íbamos a agregar más dolor. Así que eso lo tratamos de solucionar nosotros con un terror de haber quedado embarazada.
P_: Claro, y ¿qué hacer?.
DS_: Qué hacer en ese momento. Muy duro. Aparte, Argentina no sabía lo que yo había vivido. Yo sí la había escuchado a ella cuando la violan. Entonces, yo digo, ¿cómo hago para ir al médico? Argentina, mi otra hermana, de 19 años, que fue detenida en el mismo periodo, nada más que en Neuquén porque estaba averiguando por Arlen con mi mamá. Entonces yo en la familia, en el hogar, mi mamá le digo yo me iré al médico porque estuvimos una semana sucia, sin poder higienizarme yo creo que tengo infección así que voy a ir al hospital.
Y mi hermana cuando escucha eso, Argentina dice 'yo también' y entramos por separado a ver a la doctora y la doctora nos atendió perfecto. Nos puso otro nombre y apellido para hacer los análisis.
P_: ¿Se termina de regresar, se termina de volver?
DS_: Si, si, si, el camino al regreso se fue planteando sobre la marcha como te decía porque en el interín, después de esos estudios que nos hicimos, Argentina comienza con depresión. En esa época no se sabía lo que era depresión y no se si existía un psicólogo acá. Siquiatra si había, pero sicólogo no se.
¿Y cómo la ayudaba?, inventás formas. Yo la vestía dormida y la arrastraba, la sacaba a caminar, a la casa de alguna amiga o a dar una vuelta a la plaza para tenerla despierta. Pero a medida que yo me dedicaba a ella para sacarla de la depresión, yo empecé a tener anorexia. Cada vez me alimentaba menos, me alimentaba menos. Llegó un momento que mi estómago no resistía nada más que agua caliente con azúcar.
Tampoco se sabía de eso (anorexia), o sea que vas inventando soluciones. Decí que Argentina, a fin de año más o menos ya empezó a salir a flote y eso se ve que me hizo relajar a mí y yo empecé a salir también de la situación en que estaba.
Y mi mamá que no entendía nada claro, porque no se sabía de esas enfermedades a mí me decía, parecés extraterrestre, de quién vivís. Muy de mamá...
P_: Y este sábado, se va a presentar en el Aula Magna de la Universidad Nacional del Comahue este documental.
DS_: Este documental que tiene, no es solo hacer conocer la historia, sino que tiene otra motivación, que es luchar contra el negacionismo. Como no soy eterna todavía no he podido soportar eso.
Que quede material para que los docentes puedan utilizar en las aulas. Y las futuras generaciones sepan lo que sucedió. Y que no logren ocultar toda la historia. Porque es lo que pretenden.
P_: Y de primera mano, de testigos, de gente que la sufrió.
DS_: Que puedan escuchar la voz es impresionante.