Los relatos de los vecinos sobre los roces con el vecino inimputables son numerosos. Este medio había advertido hace tiempo que la situación era inflamable y que, en algún momento, la vecindad iba a explotar.
Una vecina que vendió su casa, compartían el paredón, narró lo que le tocó vivir. "Vivía en la casa que está al lado. En Nolasco 565. En 2019 me fui porque amenazó con violar a mi hija, más allá que pasábamos noches enteras con él golpeando el paredón, diciendo que nos iba a violar, que iba a matar a mi marido. Hice las denuncias en fiscalía", contó.
"Tratarlo de loco es muy liviano. Un día voy a buscar a mi hija a la EPET 10, me sigue a mi nueva vivienda y desde afuera en su moto me vuelve a insular y amenazar a mi y a mi hija. Yo lo vuelvo a denunciar y vamos a fiscalía. En ese momento éramos tres. Yo, un taxista y otra vecina del barrio y la fiscal nos plantea que es inimputable", recordó.
"Es extremadamente violento, tener que comerse la bronca, de no poder decirle nada a una persona que te dice 'que pena que no te murió la piba', 'la voy a violar en cuanto pueda'. Barbaridades a tu marido.. ¿qué terminás haciendo?, terminás yéndote", afirmó.