La Cámara de Diputados repudió hoy el atentado contra la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, durante la noche de ayer. Así lo hizo al aprobar con total consenso y en sesión especial la declaración 3370 que rechaza la agresión hacia la ex mandataria y actual presidenta del Senado de la Nación. La sesión, convocada de urgencia por la magnitud del acontecimiento, fue presenciada por el gobernador Omar Gutiérrez junto a ministros de su gabinete y por el intendente de Neuquén, Mariano Gaido.
El texto, que unificó tres iniciativas presentadas por distintos bloques y fue aprobado por unanimidad, expresa su “más enérgico repudio al atentado” sufrido por CFK y se solidariza con ella y con su familia, al tiempo que pide el esclarecimiento del hecho por parte del Poder Judicial. El Tribunal Superior de Justicia elevó una nota en “acompañamiento institucional a la declaración” emitida por el cuerpo, la que fue anexada a la normativa.
Todo el arco político coincidió en que el ataque constituyó un cercenamiento a la democracia y sus instituciones y que las diferencias políticas deben dirimirse a través del debate y no de la violencia. Asimismo, compararon los hechos con los episodios de violencia ocurridos hace casi 40 años en el país, y ponderaron la presencia de la máxima autoridad del ejecutivo provincial y municipal en el recinto.
Durante el debate, la presidenta del bloque Frente del Todos, Ayelén Gutiérrez agradeció el gesto y la presencia de todos los espacios políticos que se aunaron en este repudio porque “la situación de vulneración a todos los derechos constitucionales de nuestra democracia que se vivió ayer son inusitados y es imperioso que todos y todas nos pongamos a la altura de las circunstancias, independientemente de cualquier diferencia política”.
Su par de bloque, Mariano Mansilla señaló que se trata de un “atentado político porque no había un problema personal ni familiar contra la vicepresidenta, sino que se intentó asesinar a una persona por sus ideas y ese intento de asesinato tendrá consecuencias inesperadas en Cristina Fernández y su familia, y el sector político que ella representa”. En similar sentido se pronunciaron sus compañeros y compañeras de banca Lorena Parrilli, Soledad Salaburu, Soledad Martínez, Sergio Fernández Novoa y Darío Peralta al sostener que el ataque fue no sólo hacia la figura institucional sino hacia la máxima referente de un movimiento social, según advirtieron.
“El problema no es la grieta, la diferencia o los matices ideológicos: el problema es una decisión sistemática de algunos sectores de escalar esas expresiones de violencia hasta lo que pasó anoche”. “A esas escaladas violentas hay que contestarles con más democracia, más debates, más ideas, más contenido y menos couching y maquillaje”, enfatizó la legisladora Martínez, mientras que Parrilli bregó por un país “con democracia, en paz y no donde maten a los dirigentes que piensan distinto”.
A su turno, el titular del MPN, Maximiliano Caparroz resaltó la madurez política de la provincia evidenciada en la presencia de todos los bloques en la sesión. “Desde todas las Legislaturas lo primero que debemos defender es la institucionalidad frente a este tipo de ataques, para mostrarle al mundo que somos un país seguro donde se respeta la democracia y se cuidan sus líderes.
Desde Juntos por Cambio, el diputado César Gass coincidió en que la presencia de todos los bloques políticos en la sesión es “la respuesta que tienen que dar oficialismo y oposición frente a un caso tan extremo” y pidió construir una patria a partir del diálogo y el consenso y, en tal sentido, “dejar los extremos para que Argentina se encamine por la agenda de la paz”.
En tanto, el diputado Fernando Gallia (FNN) aseguró que en la actualidad “no hay margen para especular ni para sacar ventaja política” y recordó que, tras el regreso de la democracia, los argentinos elegimos no volver a vivir hechos como estos.
Desde el PTS-FIT, Andrés Blanco adhirió a la expresión de repudio, pero pidió que “no sea utilizada como campaña de apoyo al gobierno”. “Tenemos que poner freno a los discursos reaccionarios de odio, discriminación y violencia porque hay gente que la está pasando muy mal”, concluyó el legislador. Al argumentar su voto a favor del pronunciamiento, Blanca López (FIT) sostuvo que se trató de “un ataque político” sobre el que se debe exigir esclarecimiento, pero aclaró que el acompañamiento de su espacio “no debe ser canalizado como un apoyo” a la gestión nacional de gobierno.
Andrés Peressini (Siempre) dijo que se trató de un “frustrado magnicidio” que atentó contra una de las figuras democráticas de más alto rango del país y priorizó “la vida, la paz, la coherencia y la democracia” como herramientas políticas para la convivencia social.
Desde la CC-ARI, Karina Montecinos abonó la importancia de brindar un mensaje unívoco de que “en esto estamos todos juntos y la protección de la democracia es el punto de inflexión, y no vamos a permitir que se avance contra ella”.
Al hablar, Lucas Castelli (Avanzar) pidió “bajar los decibeles” en el entramado social porque “anoche se cruzó un límite y es inadmisible”. En tal sentido, indicó que “la intolerancia y el odio no pueden estar por encima del orden democrático”.
Presenciaron la sesión el diputado nacional, Pablo Cervi; los ministros Sebastián González –Jefe de Gabinete-; Osvaldo Llancafilo –Gobierno y Educación-; las ministras María Eugenia Ferrareso –Mujeres y Diversidad- y Sofía Sanucchi –Niñez, Adolescencia, Juventud y Ciudadanía-.
La 2° sesión especial del año comenzó a las 14 y finalizó a las 15.30h, habiéndose tratado como único punto del orden del día –tal como lo indica el reglamento para las reuniones especiales del cuerpo- el repudio en cuestión. Contó con la participación de 31 diputados y diputadas y fue presidida por el vicegobernador Marcos Koopmann.
Previo a la sesión, Koopmann había adelantado que la Legislatura va a rechazar y repudiar éste y todo hecho de violencia cada vez que ocurra y dijo que “la dirigencia política y la sociedad toda tenemos que reflexionar y entender que las opiniones personales generan divisiones que no son necesarias, porque podemos tener ideas y miradas distintas, pero eso no debe llevarnos a la violencia”.
“Es momento de ser superadores, de interpelarnos y de reflexionar sobre cómo hemos llegado a esta situación en nuestro país para que entre todos logremos fortalecer una Democracia que está por cumplir 40 años y que tenemos que seguir fortaleciendo a partir del cuidado de las instituciones y del repudio a la violencia que ya habíamos dejado atrás”, concluyó el mandatario.