Aparecieron carteles en Arroyito con la leyenda Ramón Rioseco 2.023. De esta manera, el cutralquense se mete de lleno en la disputa política de cara a la gobernación.
Rioseco ya circulaba en tren de campaña proselitista en la provincia, pero con la cartelería busca terminar de instalarse y es medible en encuestas.
El escenario no es simple. Por un lado, es conocido que Darío Martínez es un aspirante interno en el Frente de Todos. Habrá que ver si surge alguno más, aunque las chances centrales estarían entre ellos dos.
También hay que aguardar que surge de las políticas de alianzas. Martínez ha coqueteado con el sindicalismo emepenista. En concreto, con el sector de Guillermo Pereyra hay muy buenas relaciones aunque, por el momento, al menos, no está claro si alcanza para sumarse políticamente.
Por otro lado, el propio Rioseco alimenta una estrategia con la izquierda y la derecha de Juntos por el Cambio, "todos adentro". Obviamente, este podría ser un límite para el kirchnerismo neuquino que podría buscar tener su propio candidato.
Y también hay que aguardar qué ocurre con la propia interna del MPN. Fundamentalmente con el sector de Rolo Figueroa. Toda la oposición sabe que el desnivel lo puede marcar Figueroa. Y el propio Figueroa también. El último en dejar el MPN fue Jorge Sobisch y la experiencia no seduce a nadie.
En definitiva, todavía falta mucho y cada jugador está acomodando sus fichas en el tablero. Pero en esta oportunidad, no hay solo dos "players" sino que son al menos cuatro.