La disputa verbal entre el presidente del CD, Jesús San Martín y los concejales del cuerpo por la ubicación de Daniel Borromeli durante la Banca del Pueblo de este jueves, habría tenido un trasfondo extraño y propio de un infantilismo del "realismo mágico".
La intención habría sido que el vecino se ubique entre los concejales -en medio de ellos- en vez de destacarlo en la punta de la mesa de deliberaciones. ¿Para qué?, para de alguna manera "disimular" al vecino entre los concejales y que no tuviera la apariencia de una Banca del Pueblo.
El primer lugar que se le reservó a Borromeli, era el de Maximiliano Navarrete. Desde esa ubicación hubiera quedado mirando hacia la pared en vez de hacia el presidente del cuerpo y a todo el resto de los ediles.
Sin embargo, Navarrete corrió la silla que tenía un cartel que decía "Borromeli" y se ubicó en el lugar que le correspondía. Una secretaria de la presidencia, puso entonces la silla en el lugar de Fabián Godoy que estaba entrando a la sala de sesiones. Pero también, corrió la silla con el cartelito, protestó por el intento de correrlo y se ubicó en su lugar.
En definitiva, el único espacio disponible era la cabecera de la mesa contraria enfrentado a Jesús San Martín y de cara al resto del cuerpo.
Para el ciudadano de a pie, seguramente parecerá una zoncera, pero, diversas fuentes del deliberativo insistieron que esa fue la intención.
Un dato accesorio es que al momento de la Banca del Pueblo, este medio era el único con video. Había otros dos, pero tomaron audio.
En definitiva, el tema generó un debate con Hugo Deisner, María Elena Paladino, Navarrete y "Cacho" Rubilar, quien directamente cruzó palabras con el presidente del cuerpo Jesús San Martín dejando en evidencia la existencia de una "grieta" entre el presidente del CD y varios de los ediles.