Por: Juan Sepúlveda, diputado provincial
Estamos contentos por esta nueva decisión que se ha tomado con la barrera sanitaria, de correrla hacia el norte buscando progresivamente eliminarla.
En todo momento de la discusión por la barrera sanitaria se puso sobre la mesa el status sanitario con vacuna y sin vacuna para el control de la aftosa, como así la labor de los productores ganaderos y las pérdidas del mercado; pero como yo siempre digo, “hay que escuchar a la gente”, al vecino común que vive en el barrio y que tiene distintas necesidades, yo soy consciente de todo eso porque mi origen viene de ese espacio.
En nuestra comarca no todos trabajan en empresas petroleras, ni en el estado, hay mano de obra desocupada, otros que viven de changas y como está todo no llegan a fin de mes con sus gastos y todos tienen derecho a acceder a consumir carne a precios considerables, pero nadie piensa en el bolsillo del vecino, los precios que hoy pagamos acá son elevadísimos, nueve mil pesos el kilo de asado en la La Pampa contra veinte mil en nuestra provincia, alguien se queda con esa diferencia y esto también hay que controlarlo.
La barrera depende de SENASA que impone estos controles, pero fueron ellos mismos quienes ahora con la Resolución 180 proponen el levantamiento de las barreras sanitarias en concordancia con el Código Sanitario de la OMSA (Organización Mundial de Sanidad Animal).
Que consideran que como nuestro país no ha tenido casos de aftosa hace 23 años, es imprescindible readecuar las condiciones sanitarias para el ingreso de carne a la Patagonia.
Pero más allá de esto, yo en Legislatura vote con sentido común y pensando en la gente para que se elimine la barrera. Hoy veo con agrado todo esto, porque ya no plantean que quede la barrera, sino que se propone hacer un corrimiento gradual hacia el norte del Río Colorado, con lo cual la Patagonia quedaría incluida en la misma zona de La Pampa.
Cuando se debatió este tema de la barrera en la legislatura hice una lectura quizás equivocada, pero luego escuchando a los vecinos y analizando otras cosas, pude reflexionar distinto y tomar mi postura: que se debe levantar.
Interpreto que es bueno que exista la competencia, el libre comercio porque genera mejores precios y esto beneficia al consumidor, al vecino común, a la comunidad en general; de la misma manera digo que para nada estoy en contra de los productores, ni la industria sino por el contrario, es muy necesario que los gobiernos tienen que apoyar, acompañar y fortalecer a los emprendimientos, comerciantes, productores y pymes locales que generan desarrollo económico y social en una comunidad.
Los gobiernos deben trabajar en conjunto controlando y tener acciones serias con quienes están especulando con el valor de la carne y los precios.
Es una medida superadora, claro que sí, porque ingresará carne de otras provincias a nuestra región, pero con el mismo estatus sanitario y además ahora somos más los que queremos que los neuquinos puedan consumir carne más barata, escuchando el reclamo de la gente.