Andrés Vázquez, titular de la DGI, tomó la decisión poco después de asumir el cargo de ascender a su pareja, María Eugenia Fanelli, a un cargo de alta relevancia dentro del organismo, salteando rangos intermedios y con un aumento salarial considerable.
Según informó La Nación, la disposición, firmada únicamente por Vázquez, permitió que Fanelli pasara de ocupar una jefatura de sección técnico-jurídica, con un sueldo neto aproximado de entre 3,8 y 4,2 millones de pesos, a liderar la Dirección Regional Centro II de la Ciudad de Buenos Aires. Este puesto, uno de los más importantes en el área metropolitana, implica la fiscalización de medianas y grandes empresas y conlleva un salario que oscila entre los 7 y 8 millones de pesos.
El nombramiento, registrado en la Disposición 182/2024, también implicó el traslado de Luciano Botto Rostom, quien ocupaba previamente el cargo, a la Dirección Regional de Mercedes.
El Código de Ética del organismo prohíbe explícitamente la intervención en cuestiones donde exista un interés personal o vínculo conyugal. Sin embargo, fuentes internas describieron la promoción como “inusual” y “anormal”, al considerar que podría colisionar con dichas normativas éticas.
La investigación periodística fue realizada por el periodista Hugo Alconada Mon y el Centro Latinoamericano de Investigación Periodística (CLIP), con el apoyo del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, en inglés). En concreto, María Eugenia Fanelli, pasó de desempeñarse como jefa de una sección técnico jurídica, con un sueldo de bolsillo que oscilaría entre los $3,8 y $4,2 millones, a ser designada al frente de la Dirección Regional Centro II de la ciudad de Buenos Aires, con un salario neto que rondaría entre los $7 y $8 millones, según sea su antigüedad y otras particularidades, según indicaron cuatro fuentes del organismo.
La promoción de Fanelli, fue oficializada en el Boletín Oficial del 25 de octubre de 2024. El decreto respectivo, lo firmó el presidente Javier Milei junto a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich –con firma delegada por viaje del ministro de Economía, Luis Caputo—, y sin la firma del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ni de la entonces titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Florencia Misrahi.
El mes pasado Vázquez fue denunciado en la Justicia a raíz de la investigación periodística, que reveló que en 2013 había comprado tres departamentos en Miami, por unos US$2 millones, nunca registrados en las declaraciones juradas que está obligado a presentar en la Oficina Anticorrupción (OA). Al momento de asumir al frente de la DGI, seguía siendo el dueño de dos de esos tres inmuebles por más de US$1,6 millones.