La vicepresidenta Victoria Villarruel fue la vocera del reclamo por el salario de los senadores y el suyo propio destacando que Manuel Adorni, el Vocero presidencial gana más que ella. "Yo gano mucho menos que ellos y que los diputados, y mi sueldo está congelado hace un año. En breve me pagan dos chirolas y soy vice. La prepaga aumenta, los impuestos aumentan, no alcanza a nadie que viva de su sueldo con honestidad”, dijo en tono de queja.
Villarruel deslizó críticas al Ejecutivo en respuestas en redes sociales. “Los senadores pagan su comida, viajan a sus provincias, desconozco si tienen otra entrada. A mí no me da el tiempo para nada y encima no me autoriza el Estado a ganar un sueldo digno a mi función”, expresó la alta mandataria, quien percibe aproximadamente $3.764.821 mensuales sin descuentos.
Además, señaló que respecto a otros funcionarios, su salario es considerablemente más bajo. “Gano menos que el Presidente, los diputados, los senadores, ministros, jueces, diplomáticos, voceros y así puedo seguir. No me dan vivienda ni nada. Esto es cualquiera en el desfasaje de los sueldos”, apuntó.
La vice marcó puntualmente al vocero presidencial, Manuel Adorni, quien, según trascendió, recibe una dieta superior a la de la vicepresidente tras haber sido ascendido a secretario el año pasado.
Sobre el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, Villarruel fue tajante: “Martín aumentó 70% sus dietas porque él es diputado y ahora volvieron a tener aumento. Digamos la verdad, por favor. Yo no creo que un país se haga mintiendo u ocultando las cosas”.
La vicepresidente también dedicó palabras en defensa del Congreso, alejándose de la postura de Milei, quien en reiteradas ocasiones cuestionó al Poder Legislativo e incluso vetó leyes durante su primer año de mandato. “Algo es claro: sin Poder Legislativo, con todos sus problemas, nos convertimos en una dictadura, que es lo primero que hacen las tiranías: cerrar el Congreso. Así que ojo, porque eso no es democracia”, afirmó.
A otra usuaria que sugirió cerrar el Congreso, Villarruel respondió: “¿Cómo vas a cerrar un poder? ¿Queremos una dictadura?”, insistió.
Estas declaraciones dan cuenta de la creciente distancia entre la número dos del Gobierno nacional y el entorno del presidente Milei, signadas por las diferencias en temas clave como la política salarial y el rol de las instituciones democráticas.