"Este es el fin de Intercargo tal y cual la conocíamos hasta ahora", señaló el vocero presidencial Manuel Adorni, tras el fuerte conflicto con esa empresa que ayer provocó demoras en los vuelos, con pasajeros que quedaron a bordo de aviones por varias horas y otros esperando en las salas de embarque de los aeropuertos. También se despidió a 15 empleados.

“Ningún terrorista sindical podrá tomar de rehén nuevamente un pasajero y arruinarles su viaje, ni negarse a hacer su trabajo. El terrorismo sindical no tuvo prurito en secuestrar a más de 2000 pasajeros”, dijo Adorni.

En una conferencia donde participó Adorni, la ministra de Seguridad, Patricia Bulrrich, el titualr de la cartera de Desregulación, Federico Sturzenegger, explicó que la decisión “está enmarcada en un proceso” más amplio “que empezó hace un año con los precios de los viajes aéreos”, que siguió con la apertura de rutas y que “culmina hoy, con esta norma, con la desregulación de rampas y del área de rampas”.

Sturzenegger aseguró que "un punto es novedoso: tenemos un punto crítico, que es Aeroparque. Allí la capacidad tiene que ser usada plenamente. Teníamos posiciones bloqueadas. Teníamos bloqueados los slots, teníamos que Aerolíneas los bloqueaba no dejando que las otras empresas los usaran. Se modificó eso. A su vez, las empresas van a poder comercializar los slots. Nos asegura un uso a capacidad de Aeroparque, que es un área crítica”, describió.
En paralelo, el ministro de Economía, Luis Caputo, anunció el despido de 15 trabajadores de Intercargo, empresa estatal responsable del servicio de rampa en aeropuertos, por haber impedido el descenso de pasajeros de los aviones durante una protesta gremial.

La medida se tomó después de que se denunciara la privación ilegítima de libertad de los pasajeros como parte de un conflicto con la Asociación del Personal Aeronáutico (APA).