El diputado neuquino Osvaldo Llancafilo, hizo uso de la palabra durante el tratamiento de la Ley Bases. Dijo lo siguiente:


Muchas gracias, señor Presidente. Bueno, creo que a lo largo de todo este proceso que hemos llevado adelante en la Cámara, tanto en diputados como también en senadores, hemos visto una mirada centralista versus una mirada federal. Eso ha estado permanentemente girando tanto aquí en diputados como en senadores. Entendemos que para poder elaborar leyes es más que necesario hablar de acuerdos parlamentarios y hemos evolucionado, señor Presidente, porque hasta hace unos meses parecía que hablar de acuerdos parlamentarios era algo espurio. Y escuchábamos y veíamos como en las redes sociales esta casa era agredida y eran agredidos sus integrantes.

Creo que más allá de los tecnicismos, que aquí se han expresado muy bien, cuando se habla de cámara de origen, cuando se habla de cámara revisora, y hoy nuevamente estamos aquí tratando un texto después de un arduo trabajo.

Mire, Presidente, está pasando un hecho inédito, yo le diría, en la política argentina en los últimos 20 años por lo menos. El oficialismo cuenta con 38 diputados sobre 257, 7 senadores sobre 72, el 10%. Y estamos a horas de sancionar no dos leyes, Presidente. No es solo la ley bases, no es solo el proyecto de medidas fiscales, sino lo que contienen estos dos proyectos, que son ni más ni menos que 70 leyes que están siendo de alguna u otra manera modificadas.

Con lo cual aquí está claro que en este recinto hay por lo menos 100 diputados y diputadas que han contribuido con el oficialismo para alcanzar esa gran mayoría que yo no tengo dudas, parecido a lo que ocurrió la última vez, va a contar con más de 140 votos afirmativos. ¿Y esto a qué se debe, señor Presidente? se debe a que el Ejecutivo cambió la actitud, ya que aquello que aparecía espurio, como acuerdos parlamentarios, al darle paso a un experimentado jefe de gabinete, en este momento como lo es Guillermo Franco, o a un José Rolandi como secretario o vicejefe de gabinete, o también a un presidente como Martín Menem, o a un jefe de la bancada oficialista, Gabriel Bonoroni, esto que ha permitido el diálogo fluido, que ha permitido el acuerdo parlamentario.

Y aquí nosotros hemos visto cómo la macroeconomía ha ido mejorando. Hay que reconocer que tenemos más reservas, hay que reconocer que tenemos equilibrio fiscal, hay que reconocer que ha disminuido la inflación. Pero también, señor Presidente, hay que reconocer que una gran parte de la población argentina no la está pasando bien.

Con lo cual cuando desde el bloque del Movimiento Popular Neuquino sostenemos que vamos a acompañar la totalidad de la ley bases, lo hacemos con un elemento que para nosotros es fundamental, que el Ejecutivo Nacional empiece a pensar en la diaria de la gente, que el Ejecutivo Nacional comience a pensar en que el poder adquisitivo de los argentinos y argentinas no pierda versus la góndola.

Por eso vamos a otorgar estas facultades, vamos también a autorizar esta emergencia económica, esta emergencia energética que de alguna manera se está planteando en la ley bases.
Creemos también que es muy importante que a partir de ese trabajo que hemos desarrollado los bloques dialoguistas queden claros. ¿Cuál ha sido el acuerdo parlamentario? En mi provincia, como en las distintas provincias argentinas, existen economías regionales. Nuestra economía regional en Neuquén se basa en los hidrocarburos y se basa en el turismo. Y allí tenemos una joya que no es la joya de Neuquén, es la joya de toda la Argentina: la segunda reserva más importante de gas, la cuarta más importante de petróleo, nuestro presupuesto provincial se nutre en un 70% de regalías y de ingresos brutos producto de la actividad hidrocarburífera. Con ello se pagan salarios a docentes, a policías, se hace funcionar el sistema de salud.

¿Y cómo luego de este acuerdo entre los gobernadores, que son parte de las provincias productoras de petróleo, cómo no introducir modificaciones a partir de la voz de expertos? y también el trabajo que hemos desarrollado aquí adentro en la Cámara de Diputados. Y aquí tengo que destacar, por supuesto, Presidente, porque nobleza obliga a los diputados Maqueira, Cervi, Agustín Domingo, también a la diputada Pamela Berasay, también Ana Clara Romero, porque hemos trabajado de manera conjunta con los funcionarios de la Secretaría de Energía a tal punto que en el Senado uno los capítulos que no se puso en duda, fue el 100% de la redacción que tenía el capítulo de hidrocarburos.

Y eso naturalmente le da previsibilidad a una política pública que es necesaria para que la Argentina tenga divisas y no solo para que las provincias argentinas que tienen en su economía regional el petróleo, obtengan regalías: 394.000 barriles día, hoy está produciendo Vaca Muerta, un récord histórico. 105.6 metros cúbicos de gas por día está generando Vaca Muerta.
Naturalmente esto nos pone ante un escenario complejo, Presidente, porque sólo el 8% de Vaca Muerta ha sido aprovechado en sus recursos. Sólo el 8%.

La ventana de explotación de petróleo es de 30 años. La ventana de explotación de gas es de 100 años. Si nosotros no monetizamos el recurso, Presidente, la Argentina va a estar en un problema y Neuquén va a estar en un problema, Río Negro va a estar en un problema. De ahí la importancia de lo sancionado en el Senado.

Cuando hablamos del RIGI, ese régimen de grandes inversiones, hace poquito junto a un grupo participábamos en Houston y en Washington de una serie de reuniones con empresas multinacionales. No podían entender cómo no logramos esa estabilidad política que necesitamos y esa previsibilidad jurídica, porque quieren invertir en la Argentina y quieren invertir en Vaca Muerta con gasoductos, oleoductos, esa planta de GNL que queremos, los patagónicos que se pueda instalar con salida armada en la provincia de Río Negro.

Ahora, para eso hay que dar ventajas, Presidente, impositivas y fiscales como ocurre en cualquier país del mundo. Y, mire, yo he escuchado a quienes gobernaron hasta el 10 de diciembre del año pasado. Voy a traer aquí, Presidente, y usted seguramente se va a acordar porque era parte de la función pública en aquel momento en un cargo preponderante.

Año 2013, seguramente se acuerda del acuerdo Chevron- YPF, 1.500 millones de dólares, una gran inversión. Me acuerdo que fueron recibidos los ejecutivos de Chevron, una empresa estadounidense, por la actual presidenta en aquel momento, Cristina Fernández de Kirchner.

Se valló toda la legislatura provincial en Neuquén. Decían que venían por Argentina, venían por nuestros recursos. Mire, fue la cabecera de playa del despegue de los no convencionales de gas y petróleo en la provincia de Neuquén.

Entonces, saquemos el fantasma que tenemos con este tema del RIGI, porque sin lugar a dudas es una ventaja comparativa de cara al mundo en función de buscar esas inversiones que le va a dar a cualquier privado la posibilidad de ganar dinero en definitiva, el privado trata de eso cuando invierte. Por otro lado, Presidente, permítame decirle que Neuquén le aporta al país el 70% del gas, el 50% del petróleo y el 25% de la energía hidroeléctrica.

Con lo cual es muy importante que se hayan incorporado también al esquema del RIGI a partir de las modificaciones del Senado la posibilidad de que las PyME´s neuquinas tengan también esas alternativas y esas ventajas impositivas y ventajas tributarias. Ahora, Presidente, así como he justificado nuestro acompañamiento al proyecto de ley bases en su totalidad, debo decir que tengo diferencias con la ley que hace al proyecto de medidas fiscales. Vamos a acompañar en general ese proyecto, pero en particular no estamos de acuerdo en la restitución de ganancias. Creemos que el país ya pasó esa discusión el año pasado cuando inclusive el propio Presidente de la Nación, la Vicepresidenta de la Nación actual, siendo diputados, votaron justamente en favor de eliminar la cuarta categoría de los salarios. ¿Y por qué lo planteamos, Presidente? Porque el costo de vida en la Patagonia es totalmente distinta nacional.