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El director ejecutivo de la Agencia de Recaudación bonaerense, Cristian Girard, aseveró que el gobierno de Milei “es la fase superior del macrismo: va en la misma dirección, pero más rápido”.
El director ejecutivo de la Agencia de Recaudación bonaerense (ARBA), Cristian Girard, afirmó este viernes que el proyecto de Ley Bases aprobado el lunes pasado por Diputados “conduce a un hiper-regresividad tributaria”, anticipó que “el Estado renunciará a cobrarle impuestos a los sectores de mayor capacidad contributiva” y advirtió que las reformas contenidas en la iniciativa “castigan a las provincias”.
El funcionario posteó un extenso hilo en su cuenta de la red social X (exTwitter), en el que aseveró que el gobierno del presidente Javier Milei “es la fase superior del macrismo: va en la misma dirección, pero más rápido” y vaticinó que, “de convertirse en ley el Proyecto Ómnibus, Milei acabará por reformar el Estado de manera hiper-regresiva”.
El economista puntualizó que “en el marco de una crisis fiscal potenciada por el sobre-endeudamiento externo, el Estado renunciará a cobrarle impuestos a los sectores de mayor capacidad contributiva”, destacó que, al mismo tiempo, “recorta gastos en políticas que impactan en una mejora en el nivel de vida de los sectores populares y sostiene intactos los impuestos al consumo, que pagan en mayor proporción los argentinos de menores ingresos”.
“Que la crisis la paguen los de abajo. ¿De verdad comprás que eso es rebeldía?”, se preguntó y apuntó que “el shock económico inicial propiciado por el gobierno de La Libertad Avanza (devaluación, liberación de precios, freno a la obra pública, despidos, recorte a las jubilaciones y atraso salarial) dio lugar a una acelerada profundización de la desigualdad en la distribución del ingreso”.
Que la crisis la paguen los de abajo. ¿De verdad comprás que eso es rebeldía?”
CRISTIAN GIRARD, TITULAR DE ARBA
Para Girard, “las principales reformas tributarias propuestas en el capítulo tributario del denominado Proyecto de Ley Ómnibus vienen a consolidar esa apropiación de recursos por parte de los sectores más pudientes y concentrados en detrimento de los trabajadores y la clase media.
Por otro lado, entendió que “también vienen a atar de manos al Estado, ya que limitará su capacidad de cobrar impuestos a los que más capacidad contributiva tienen para así financiar políticas públicas que permitan cerrar las brechas de desigualdad, una condición necesaria para el desarrollo económico nacional”.
Así, describió que “la moratoria, el blanqueo y la significativa reducción del impuesto a los Bienes Personales vienen a cristalizar esta inequidad distributiva que forzaron las reformas de Macri y el sobreendeudamiento externo, acuerdo con el FMI mediante”.
Entendió luego que “el Proyecto de Milei propone una moratoria con el fin de que el Estado nacional pueda hacer caja rápidamente y de alcanzar más rápidamente el superávit fiscal que reclaman ‘los mercados’ y el Fondo” y apuntó que “como resultado de esto, a los grandes deudores se le condonarán multas e intereses”.
Posteriormente, dijo que “se habilitará un blanqueo de ingresos evadidos y/o fugados, también con el objetivo de hacer caja en lo inmediato y conseguir dólares frescos para saciar a los acreedores externos y especuladores, de adentro y de afuera, beneficiando directamente a los evasores y fugadores con tasas mínimas o, incluso, nulas” y analizó que se trata de “un premio para los que desfinanciaron al Estado y al país. Héroes, según Milei”.
La moratoria, el blanqueo y la significativa reducción del impuesto a los Bienes Personales vienen a cristalizar esta inequidad distributiva que forzaron las reformas de Macri y el sobreendeudamiento externo”
CRISTIAN GIRARD, TITULAR DE ARBA
Además, expresó que “para las personas más ricas, se crea un programa de pago anticipado del Impuesto a los Bienes Personales, que premia el adelanto del pago del período 2023-2027 con una reducción de tasas a casi cero, y una futura estabilidad tributaria hasta 2038” e indicó que “para remate, esto irá acompañado también de la eliminación total del Impuesto a las transferencias de inmuebles. Total, ya que estamos”.
El titular de ARBA explicó que “esto, a su vez, está alineado con el capítulo del RIGI, que busca dar seguridad jurídica a los inversores, fundamentalmente extranjeros y con un fuerte sesgo hacia actividades extractivas, con bajo nivel de agregado de valor local” y recordó que “el argumento es que así se generará confianza en el país y mejorará el ‘clima de negocios’, incentivando las inversiones”.
De ese modo, señaló: “Spoiler alert: el nivel de inversión no depende del clima de negocios, sino del crecimiento económico” y opinó que, entonces, “los beneficios para los ricos y los sectores concentrados propiciados por el proyecto de ley ómnibus solo redundarían en una mayor transferencia de recursos desde abajo hacia arriba, y hacia afuera”.
Finalmente, advirtió que “esta reforma castiga a las Provincias, dado que caerá la recaudación de impuestos que son coparticipables, lo cual, sumado al desplome de la actividad económica, generará una inevitable merma en los recursos provinciales (tanto provenientes de la coparticipación nacional, como de la gestión recaudatoria local) y, por lo tanto, una mayor dificultad financiera para hacer frente a los gastos de funcionamiento esenciales”.
“Esto último, ‘pagar con guita ajena’, es una constante en todos los aspectos que involucran cuestiones tributarias en los diversos capítulos del proyecto: menos recaudación de impuestos coparticipables, más recursos para el tesoro nacional”, prosiguió el funcionario y concluyó: “Ya lo confesó el propio Milei, entusiasmado ante un grupo de aduladores comensales en la cena de la Fundación Libertad: ‘Hay que barrer con el fisco en todas las dimensiones’. Acá no entiende el que no quiere”.