El jurado popular declaró “culpables” a las cinco personas que fueron imputadas por el fiscal jefe Juan Agustín García por el femicidio de Agostina Gisfman.
Luego de cuatro horas de deliberación aproximadamente, los y las integrantes del jurado emitieron el veredicto hoy a las 14.15 en la Ciudad Judicial: fueron declarados “culpables” Juan Carlos Monsalve; Claudio Enzo Monsalve; Julio Maximiliano Zapata; Gustavo Alejandro Chianese; y Ana María Perales.
El delito atribuido por unanimidad a Juan Carlos Monsalve; Claudio Enzo Monsalve; y Julio Maximiliano Zapata, fue coautores de homicidio agravado por haber sido causado con alevosía, con el concurso premeditado de dos o más personas y por haber sido perpetrado por hombres hacia una mujer en contexto de violencia de género (femicidio).
En el caso de Ana María Perales, por mayoría de 11 votos, instigadora del delito de homicidio agravado por haber sido causado con alevosía, con el concurso premeditado de dos o más personas y por haber sido perpetrado por hombres hacia una mujer en contexto de violencia de género (femicidio).
Y, en el caso de Gustavo Alejandro Chianese, por mayoría de 10 votos, partícipe secundario de homicidio agravado por femicidio.
Con el veredicto, el jurado popular respaldó el pedido que había efectuado el fiscal jefe en el alegato de clausura para que las personas imputadas fueran declaradas responsables penales por el femicidio.
De este modo concluyó el juicio por jurados que había comenzado el martes 11 de octubre. Ahora, resta debatir la imposición de penas que se discutirán en una audiencia que fijará la Oficina Judicial para los próximos días.
Durante las cinco jornadas de juicio, el fiscal jefe logró acreditar con la producción de prueba la teoría que el Ministerio Público Fiscal presentó sobre el caso. El hecho ocurrió el 14 de mayo de 2021, pero Juan Carlos Monsalve había conocido a Agostina Gisfman un tiempo antes, en marzo del mismo año, a través de Gustavo Alejandro Chianese, a quien le había pedido que lo contactara con una mujer que prestara servicios sexuales. Así fue que Monsalve y la víctima mantuvieron al menos un encuentro.
A mediados de abril, Monsalve tuvo un conflicto con su esposa, Ana María Perales, quien advirtió la publicación de fotografías en las que Gisfman estaba con él. A partir de esto, Perales comenzó a exigirle a Monsalve que matara a Gisfman, y le planteó que, si no lo hacía, rompería la relación. El 11 de mayo, y como su esposo no había cumplido, Perales abandonó la vivienda en la que ambos convivían y se fue hacia la localidad de San Javier, en la provincia de Río Negro. Ante esta situación, Monsalve intensificó la organización de un plan para asesinar a Gisfman, tal como le había exigido su esposa. Por esta razón se contactó con Chianese.
El viernes 14 de mayo de 2021, Chianese se comunicó con Gisfman. Le pidió que concurriera a la rotonda ubicada en la ruta 151 y Circunvalación de la ciudad de Cipolletti. Allí la esperaría Monsalve para mantener un nuevo encuentro sexual. Gisfman acudió al lugar indicado.
Cerca de las 19.20, Monsalve se encontró con la víctima y la trasladó en una camioneta Chevrolet Tracker que alquiló, hacia la zona de meseta de la ciudad de Centenario. Al llegar a las inmediaciones de calles Juan Domingo Perón y José Brillo, en un sector del basural de la meseta, llegaron otros dos hombres al lugar: Julio Maximiliano Zapata y Enzo Claudio Monsalve. Lo hicieron en una camioneta Chevrolet S10, propiedad de Perales.
En ese lugar, los tres asesinaron a Gisfman mediante al menos dos puñaladas que le provocaron un shock hemorrágico. Luego prendieron fuego el cuerpo y, aproximadamente a las 20.40, se retiraron del lugar en ambos vehículos.
Durante el desarrollo del juicio, el fiscal jefe estuvo acompañado por la asistente letrada Guadalupe Inaudi y el agente Héctor Moncada. El caso, en forma inicial, fue investigado por la fiscal María Eugenia Titanti con la colaboración del asistente letrado Bruno Miciullo y el equipo de la fiscalía de Homicidios.