El Ministerio Público Fiscal (MPF) ha confirmado que Deyanira Aylén Vázquez, la joven policía hallada sin vida en su domicilio del barrio Melipal, falleció a causa de un disparo de arma de fuego en el tórax. Este hallazgo, revelado por el informe preliminar de la autopsia, representa un cambio significativo en la investigación.
Inicialmente, la causa se había caratulado bajo los protocolos de femicidio, una medida estándar ante la muerte violenta de una mujer, para asegurar que se activaran todas las diligencias necesarias. La escena fue resguardada de inmediato, y se procedió a la recolección de testimonios y el análisis de registros fílmicos para esclarecer lo sucedido.
La determinación forense de que la causa de muerte fue una herida de arma de fuego en el tórax establece una línea de investigación más definida, permitiendo descartar otras hipótesis iniciales. No obstante, los peritos continúan trabajando en estudios complementarios que podrían precisar detalles cruciales, como la distancia del disparo, la trayectoria del proyectil y si existieron indicios de lucha o defensa.
El impacto en la comunidad y la decisión sobre el demorado
El trágico hallazgo del cuerpo de Vázquez, quien se desempeñaba como policía desde hace un año y ocho meses, generó un profundo impacto en la comunidad y en la fuerza policial de la provincia.
Las primeras diligencias incluyeron entrevistas a familiares, vecinos y compañeros de trabajo, así como un relevamiento exhaustivo de las cámaras de seguridad en la zona para reconstruir las últimas horas de la joven y determinar la existencia de situaciones previas de violencia o amenazas.
Basándose en la información forense y los elementos reunidos hasta el momento, la fiscal del caso, Guadalupe Inaudi, ha resuelto que el hombre que había sido demorado y luego detenido, la pareja de la joven, sea liberado en las próximas horas. Por el momento, el MPF descartó formularle cargos, aunque aclaró que la investigación sigue abierta y que la persona continúa supeditada a la causa.
Esto implica que deberá presentarse ante la Justicia cada vez que sea citado y no podrá entorpecer el desarrollo de las pesquisas.
Entre las medidas pendientes figura un peritaje clave: determinar la presencia o ausencia de restos de pólvora en su cuerpo, lo que podría aportar indicios relevantes sobre la mecánica del hecho. La fiscalía informó que, a pesar de la liberación del principal sospechoso, la investigación se mantiene activa y no se descarta ninguna hipótesis hasta contar con todas las pruebas periciales y testimoniales. El caso continúa bajo estricta reserva para no obstaculizar las diligencias en curso.