La tranquila calle del barrio de Florida donde se desat la tragedia Street View

María Elvira Forfaro (38) falleció a raíz de una herida de arma blanca, probablemente, una tijera, y delante de su bebé de dos semanas. La pareja de la víctima, Lucas Ezequiel Polito (42), está detenido desde el sábado como sospechoso de haber cometido el crimen.

La mujer asesinada delante de su bebé de dos semanas, en una casa del partido bonaerense de Vicente López, murió a raíz de una puñalada en el tórax provocada presuntamente con una tijera que se halló en una de sus manos, aunque los investigadores creen que fue plantada por su pareja, que continúa detenida por el femicidio y será sometida a un peritaje psiquiátrico.

Fuentes judiciales informaron este domingo a Télam que el resultado preliminar de la autopsia al cuerpo de María Elvira Forfaro (38) reveló en las últimas horas que la causa de la muerte fue una herida de arma blanca que le ingresó por la región escapular derecha y le llegó hasta el tórax. De acuerdo a los médicos forenses, la mujer presentaba otra puñalada importante en la zona del cuello, también de carácter vital, pero que no le ocasionó el deceso. Además, el cuerpo tenía varios golpes, detallaron los informantes.

A su vez, el preliminar de la autopsia arrojó que las heridas de arma blanca eran "compatibles" con la tijera que los peritos hallaron en la mano derecha de la víctima, cuando esta yacía muerta en el piso y de espaldas.

"Las sospechas apuntan a que el imputado podría haberla plantado", explicó a Télam una fuente con acceso al expediente y aclaró que, si la mujer era diestra, nunca pudo haberse provocado ella misma la herida mortal en el mismo lado del cuerpo.

"Además. la víctima presentaba cortes en las palmas de la mano lo que es compatible con signos de defensa al querer agarrar la tijera con la que la atacó", añadió el pesquisa, quien aguarda el informe final del protocolo de autopsia para establecer la data de la muerte.

En tanto, por el femicidio continúa detenido la pareja de la víctima, Lucas Ezequiel Polito (42), quien el sábado fue indagado por el fiscal de la causa, Matías López Vidal, que debió interrumpir la diligencia ya que el acusado manifestaba incoherencias.

Ante esta situación, el sospechoso fue llevado a la psiquiátrica del Hospital Interzonal General de Agudos "Eva Perón" (ex Castex) de San Martín, donde lo revisaron, pero no le suministraron medicación alguna.

De acuerdo al investigador consultado, los estudios médicos previos y posteriores a la indagatoria arrojaron que se encontraba en condiciones declarar ante la justicia, por lo que el fiscal ordenó una serie de peritajes más profundos para establecer si comprende la criminalidad de sus actos, lo que demandará varios días más.

En este contexto, los pesquisas no descartan que el acusado haya intentado fingir alguna alteración de su estado de salud mental, añadió la fuente.

El femicidio

El hecho fue descubierto el viernes por la noche, en una casa situada en Virrey Liniers al 600 de la localidad de Florida, partido de Vicente López, en la zona norte del Gran Buenos Aires, donde Forfaro y Polito convivía junto a su bebé.

Fuentes policiales y judiciales informaron a Télam que el hallazgo ocurrió luego de que el padre del acusado mantuvo una llamada telefónica con él hasta que en un momento escuchó un ruido extraño y se cortó la comunicación.

Al intentar conversar nuevamente, Polito no atendió más y el hombre se dirigió a la casa de su hijo, donde encontró a la mujer fallecida


Personal de la comisaría local fue alertado a través del 911 y al llegar aprehendió como sospechoso a Polito, quien tenía manchas de sangre en su cuerpo, al igual que su bebé de dos semanas que tenía en sus brazos.

Según las fuentes, el médico legista observó a simple vista que la mujer sufrió un fuerte golpe en el rostro y que tenía lesiones cortopunzantes en el cuerpo. Efectivos de Policía Científica secuestraron en el lugar una tijera que posiblemente pudo haber sido utilizada por el agresor.

El sábado por la tarde, el fiscal López Vidal comenzó a indagar al sospechoso como acusado del delito de "homicidio agravado por el vínculo" y durante la diligencia el abogado particular de la defensa manifestó que su cliente estaba mal psiquiátricamente.

En ese marco, el imputado comenzó a expresar incoherencias y no paraba de moverse en la sala, por lo que el fiscal interrumpió la audiencia, dejó constancia de lo ocurrido en un acta y cerró el procedimiento.

Por otro lado, los pesquisas corroboraron que no había denuncias previas por violencia de género y que la pareja hacía un año aproximadamente que vivía en ese lugar.