Un reciente informe privado ha puesto la lupa sobre el deterioro de la capacidad de pago de las familias argentinas, revelando que la irregularidad en el sector minorista alcanzó el punto más alto de la última década. Este pico de incumplimiento se da en un contexto paradójico, donde el stock de financiamiento total al sector privado ha comenzado a mostrar signos de recuperación.
La consultora Curat, Martínez Larrea & Asociados, basándose en datos oficiales, señaló que la morosidad en los préstamos bancarios otorgados a individuos se disparó al 10,1% de la cartera total. Este porcentaje incluye los créditos con atrasos superiores a los 30 días, confirmando una tendencia ascendente ininterrumpida desde finales de 2016, cuando el indicador apenas rozaba el 2,8%. El 10,1% registrado en septiembre de 2025 configura el peor registro del segmento en diez años.
Las empresas muestran mejor comportamiento
La situación es marcadamente diferente en el segmento corporativo. La irregularidad en los préstamos comerciales se ubicó en 5,6%, incluso registrando una baja en comparación con meses previos.
En el cómputo global, la morosidad total del crédito al sector privado se estableció en el 7% del stock, un dato que evidencia que el estrés financiero está concentrado principalmente en las finanzas personales.
El financiamiento vuelve a crecer, con baja base
Este fuerte incremento de la mora sucede mientras el crédito al sector privado repunta desde mínimos históricos. Aunque el stock de préstamos cayó un 1,6% real en noviembre, el informe del Banco Central (BCRA) confirma un crecimiento interanual del 35%.
Gracias a este repunte, la relación entre el crédito y el Producto Bruto Interno (PBI) logró duplicar el registro de inicios de 2024, alcanzando el 9% (o 11,9% si se incluye el financiamiento en dólares). Pese a la mejora, el ratio sigue siendo significativamente bajo en comparación con otros países latinoamericanos.
El mapa de la deuda: regiones y sectores críticos
El análisis regional revela marcadas diferencias en la salud financiera de los hogares:
·Gran Buenos Aires (GBA): Lidera la morosidad con un preocupante 14% de la cartera individual en situación irregular, superando ampliamente el promedio nacional del 10,1%.
·Provincias más Afectadas: Formosa encabeza el ranking nacional de incumplimiento de individuos con un alarmante 27,2%, seguida por San Luis y Santiago del Estero (ambas por encima del 14%). Otras regiones como CABA, Pampeana, Cuyo y Patagonia mantienen tasas más contenidas.
En el ámbito empresarial, las regiones de Mesopotamia, Patagonia y GBA concentran la mayor irregularidad comercial, aunque a niveles inferiores al segmento minorista.
En la desagregación por sector económico, la Construcción es la actividad con mayores dificultades, registrando una mora del 6,9%, cercana a los niveles de fines de 2023. El Sector Primario y los Servicios Públicos son, en contraste, los que mejor cumplen sus obligaciones.
Diferencias entre entidades
El informe concluye que la calidad de la cartera de crédito varía sustancialmente según la entidad financiera:
·Bancos Extranjeros: Exhiben la mejor calidad de cartera y los menores niveles de morosidad.
·Bancos Privados Nacionales: Muestran la mayor incobrabilidad general, especialmente en créditos personales y prendarios.
·Bancos Públicos: Irónicamente, son los que presentan la menor mora en los préstamos otorgados a individuos, contrastando con el contexto general de tensión financiera para los hogares.
