La pasión mueve montañas, genera proezas y lleva al hombre a ir un paso más allá, por un deseo. Hay pasiones trágicas, como la de Romeo y Julieta y, para no estirar más de la cuenta las cosas, hay otras que mueven a decisiones... y los gustos se dan en vida, por cierto.
El Canal de Boca en Instagram publicó el relato de un joven de centenario, trabajador petrolero, que no tenía más días de licencia en el trabajo y renunció para irse a ver a Boca a Miami.
"Yo renuncié a mi trabajo para venir a la boquita", contó entusiasmado el ahora desocupado. "Trabajaba en una empresa de servicio petrolero... Vine de Centenario provincia de Neuquén a ver a Boquita", afirmó. "Ahora hay que buscar laburo, ya va a salir", cerró despreocupado.